El pasado 28 de julio se conmemoró el centenario del inicio de la I Guerra Mundial, el horrendo acontecimiento que metió a la humanidad en la modernidad del siglo XX a golpe de entre 10 y 31 millones de muertos y unos 25 millones de heridos y mutilados.
Como siempre ocurre con las guerras, el conflicto supuso un gran avance en todas las disciplinas científicas y también, cómo no, en la relojería. Por ejemplo, se pasó de llevar relojes de bolsillo y considerar los de pulsera como algo femenino a llevarlos siempre en la muñeca, porque los soldados no se podían permitir apartar la vista del frente mientras buscaban su reloj en el bolsillo.
La I Guerra Mundial fue también el inicio de la aviación, y los relojes que se usaban en los aeroplanos se llevaban también en la muñeca. Ese es el origen de los llamados «relojes de aviador», cuya aceptación entre los aficionados nunca declina.
Presentamos ahora el WW1 Guynemer, un reloj homenaje al mítico piloto Georges Guynemer que pude ver en Baselworld y que ya está presente en España, de la mano de Bell & Ross.