Hay veces que las casas relojeras se apartan de lo que constituye el negocio del día, el desarrollo de las diferentes colecciones, las variantes de materiales, colores o complicaciones para volver a las esencias estéticas del oficio, creando piezas que son un homenaje a las técnicas decorativas más antiguas y cada vez más escasas debido a su complejidad y la exigüidad de artesanos especializados.
Girard-Perregaux presentó en Baselworld tres piezas de la colección Gabinete de las Maravillas que pretender ser uno de esos homenajes. Dejo aquí la nota de prensa completa de la manufactura con muchas más fotos de las oficiales para que poder apreciar en toda su dimensión el trabajo de los artesanos.
Merece la pena.
The Chamber of Wonders
Girard-Perregaux renueva y difunde la tradición de los famosos Cabinets of Curiosities, los precursores de los museos que emergieron en la Europa del Renacimiento, con la colección Chamber of Wonders. Por medio del honorífico nombre de Gabinete de las Maravillas, la Marca da entrada a un lugar rebosante de tesoros increíbles: descubrimientos, secretos, historias fabulosas, diversidad natural y curiosidades en todas sus formas…
Gracias al talento de los miniaturistas, que crean los delicados detalles sobre un entorno de materiales extraordinarios, la colección Chambers of Wonders ofrece tres paréntesis cartográficos del tiempo meticulosamente inmortalizados en el limitado espacio de la esfera de un reloj. Un auténtico reclamo a la expresión cuya poesía y, en ocasiones fantasía, satisface la necesidad de escapar. Magia cartográfica…
Visiones del mundo a través de los siglos
Como breves ilustraciones de la historia del conocimiento geográfico, los mapas del pasado son, para las civilizaciones que los crearon, tanto imaginativas referencias como concepciones científicas incompletas. En su forma de acercarse a los espacios y las fronteras, son testimonio de certezas de la posición de sus autores en el centro del mundo.
En una búsqueda de conocimiento que inspiró a poetas, escritores, científicos y exploradores, los diseñadores de estos mapas a menudo relegaban sus vecindades territoriales a periferias pobladas por criaturas míticas. Fronteras, ríos y dimensiones geográficas fueron el resultado de un ciencia multidisciplinar donde todo quedaba aún por descubrir. Era una época donde las observaciones científicas estaban fuertemente influenciadas por el inconsciente colectivo. Todos resultan tan entrañables y sorprendentes que los mapas creados transmiten aún la dimensión de una relatividad espacial del factor tiempo. El tiempo, inevitable amigo del conocimiento, transformaba las fronteras en lo que parecía ser nueva información.
Colección The Master of Maps
Tres relojes, tres épocas, tres mundos interpretados con excepcional maestría en este Gabinete de las Maravillas; The Pearl of Wonders, the Terrestrial Map y The New World. Imágenes renacentistas que son interpretadas por Girard-Perregaux en tres esferas, en piezas numeradas que forman parte de un trío de relojes de oro rosa Girard-Perregaux 1966, equipados con un calibre automático manufactura, como paradigma de diferentes perspectivas y emociones.
Nacido en los talleres de la Manufactura, el calibre GP03300 ostenta la tradición relojera y las garantías de fiabilidad y precisión propias de Girard-Perregaux. Su platina y los puentes han sido cuidadosamente elaborados, biselados, perlados y decorados con motivos Côtes de Genève. Compuesto por 205 piezas, ofrece una reserva de marcha de 46 horas con una frecuencia de 28.800 alternancias por hora. Sus 25,60 mm de diámetro (11 ½ líneas) para un grosor de 4,20 mm están perfectamente adaptadas a las refinadas líneas de una elegante caja en oro rosa, desarrollada y creada en los talleres de la Manufactura. Un ejemplo de armonía que luce el extraordinario detalle de un bisel pulido de suave curvatura que ensalza su delgadez.
The Pearl of Wonders
Circular como la circunferencia de un reloj clásico, el mapa esgrimido durante la primera mitad del siglo XV por el historiador Ibn al-Wardi es, en sí mismo, un momento condensado de historia. En primer lugar, se inspira en las teorías de Ptolomeo, el astrónomo y astrólogo greco-egipcio que vivió en Alejandría a principios del siglo segundo a.d. y que es considerado como el padre de la geografía. Este atlas del mundo demuestra, en el punto de inflexión entre la Edad Media y el Renacimiento, la influencia de la cultura Árabe en otras civilizaciones. La astronomía árabe estuvo muy avanzada en la Edad Media, pues describieron constelaciones, crearon mapas del cielo y perfeccionaron instrumentos como el astrolabio.
Centrado en la península arábiga, centro de las peregrinaciones sagradas, las improbables líneas de este mítico mapa permiten reconocer África acogiendo las montañas donde el Nilo tiene su origen. El río, representado por una amplia línea azul, desemboca de pronto en el Mediterráneo en un abrupto ángulo recto. En el centro, rodeado por el Mar Rojo y el Golfo Pérsico coronado por el Océano Índico, la Península Arábiga ocupa un semicírculo. Otros notables elementos son el Golfo Pérsico, el Océano Índico y, en la distancia, India, Sindh y China.
Materiales y técnicas
Para captar un monumento tal de la historia antigua, ¿qué podría ser más apropiado que la piedra sodalita con su estructura isométrica, compuesta por minerales pobres en sílice? Su característico color azul y su estructura cristalina son incentivos para sondear aún más las profundidades del conocimiento. Esta piedra sodalita, conocida por su dureza, proviene de un bloque del que se extrae un disco de 0,70 mm de altura, cortado y pulido a mano. Meticulosamente tallado y grabado a mano, se precisan cerca de 4 horas de trabajo con bisturí para albergar el fragmentado mosaico de un papiro de 0,25 mm de grosor.
Una vez bloqueado entre dos placas de acero, para asegurar que la superficie queda perfectamente plana, el pergamino, como un territorio inesperado de expresión, puede albergar el talento de un miniaturista que, durante 28 horas, reproduce los contornos de un mapa antiguo. A continuación, un baño de laca abriga la obra de arte con un fino velo protector y estabilizador. Se precisan aproximadamente 50 horas de paciencia antes de poder admirar The Pearls of Wonders.
The Terrestrial Map
Restringido dentro de un círculo, el antiguo mapa chino escogido por Girard-Perregaux está inspirado en la labor del jesuita italiano, Matteo Ricci. Teólogo, filósofo, matemático, cosmólogo y astrónomo, este sacerdote tomó parte de una expedición misionera en Asia. Instalado en Macao en 1582, pasó el resto de su vida en China, compartiendo su conocimiento con académicos y oficiales hasta el punto de convertirse en uno de los primeros occidentales al que se le permitió cruzar los muros de la Ciudad Prohibida. Bajo la Dinastía Ming, tradujo el conocimiento cartográfico global para sus anfitriones, reposicionando a China como el punto de partida.
Auténtica oda a la conquista de nuevos territorios, este globo ya reconocía los cinco continentes. Cabe reconocer que Libia resumía África y la Tierra Austral asumía la presencia de Australia. No obstante, se representaron los cuatro océanos. Otras sofisticadas indicaciones, hábilmente escritas en chino, muestran una increíble precisión geográfica y astronómica: el Río Nilo es el río más grande del mundo, la Tierra es redonda, las variaciones en la duración del día y la noche se enumeran y explican, y las distancias entre la Tierra y algunos planetas también se incluyen de forma gráfica.
Materias naturales y tinta china
Para esta excepcional pieza, Girard-Perregaux ha escogido la consistente pureza del jade blanco, con las venas translúcidas que confieren sensación de profundidad. Para cada esfera, es necesario extraer una fina capa esculpida de un bloque de este material que, tras ser cuidadosamente pulido a mano, alcanza su grosor ideal de 0,70 mm para lucir una superficie perfectamente plana.
A esto se suman 17 horas de meticuloso trabajo artesanal por parte de un experimentado miniaturista, que utiliza tinta china natural mezclada con un aglutinante especial. No ha lugar para la vacilación ya que la tinta se seca muy rápido. La cara visible del material recibe certeros toques de talento, luz de contraste y tonos oscuros, religiosamente aplicados para permanecer fiel al original. Poco a poco el famoso globo terráqueo y los históricos relieves emergen hasta alcanzar la precisión requerida de los tonos grises y las delicadas y diminutas líneas costeras y territoriales.
The New World
Desde los inicios de la cartografía moderna, 142 bocetos de mapas se atribuyen a Sebastian Münster (1488-1552), un erudito alemán que se trasladó a Basilea tras convertirse en Protestante. Su obra, Novus Orbis, estímulo a los viajes de exploración, se incluyó en su obra principal, Cosmographia Universalis, una colección cartográfica ricamente ilustrada y detallada. Erudito versátil, este profesor fue además traductor de latín, historiador, astrónomo y matemático.
Girard-Perregaux ha elegido honrar la memoria de este hombre, considerado como una de las mayores referencias a la cartografía moderna, en su Gabinete de las Maravillas.
Recibió el apoyo de más de 120 empleados para crear esta obra maestra para la que confió en la contribución de procesos artesanos de última generación, similares a la alta relojería actual. Tales como la talla en madera de artistas de la época: Hans Holbein el joven, Urs Graf, Hans Rudolph Manuel Deutsch y David Kandel. Su estilo está lleno de información para-geográfica, útil para la comprensión de los estilos de vida de la época. También ofrece una sólida base sobre la que comparar la evolución urbana de algunas ciudades grandes. Este contenido es admirado por la Marca de La Chaux-de-Fonds, una metrópoli relojera situada en la lista de Patrimonio Universal de la Unesco.
Marquetería y piedras semi-preciosas
El más colorido de los mapas contenido en La Chambre des Merveilles, muestra los campos creativos poblados con fragmentos organizados en mosaico. Está elaborado con verdadera marquetería en piedra, en una mezcla de tonos de venturina azul y rosa, calcita y nefrita canadiense.
Se precisan alrededor de 95 horas para elaborar una sola esfera. Las piedras cuidadosamente seleccionadas son talladas en mini discos que, al final de una operación de pulido manual, se reducen a 0,50 mm. El corte y ensamblado de estas micro-piedras requiere una extraordinaria meticulosidad, paciencia y maestría. La técnica consigue dar la impresión de que la tierra flota sobre el mapa, reforzada por la micro pintura del artista en seis tonos diferentes.