Ulysse Nardin no es sólo una manufactura con una historia creativa más que notable. Es también una relojera que atiende a mercados donde se aprecian artes relojeros no centrados en los calibres y sí en las artes decorativas que tienen que ver sobre todo con la esfera. Es algo que todas las marcas más tradicionales practican en un grado u otro, pero se diría que UN destaca por su afición a este tipo de piezas.
Particularmente el motivo de los barcos está muy presente en su colección, y valga este Classico Kruzenshtern como muestra de una técnica cuyo resultado final puede no ser del gusto de todo el mundo, pero que tiene mérito en tanto en cuanto supone el mantenimiento de técnicas cada vez más escasas en la relojería.
Para interpretar con precisión su imagen real, Ulysse Nardin empleó la técnica de esmaltado cloisonné. Esta técnica de esmalte parece que se introdujo en Europa a través de Irán y Bizancio alrededor del siglo X. Consiste en rellenar con esmalte los alvéolos o cavidades dejadas expresamente en las piezas. Estos compartimentos sobresalen del plano por finos bordes llamados cloisons realizados con hilos metálicos que se adhieren a la superficie de la lámina que forma el objeto. En el caso del reloj que nos ocupa, cada sección se separa con finos hilos de oro y se necesitan más de 500 mm para realizar los cloisons.
El esmalte se queda unido como un relleno dentro de las cavidades por medio de fusión. Se pueden hacer dibujos geométricos elementales hasta los más complicados según el autor de la obra. En orfebrería se aplicó en la Antigüedad y en la Edad Media en elementos litúrgicos como cruces procesionales, relicarios e incluso en pequeños altares.
Una vez rellenados todos los huecos, la esfera pasa al horno, donde es calentada a temperaturas entre 750 y 850 º C. Es una operación delicada porque el calor puede producir cambios en la superficie pintada o deformaciones del metal utilizado para crear las separaciones, lo que obligaría a desechar la esfera y volver a comenzar el proceso.
Como no todo es decoración, hay que hacer notar que el reloj se mueve gracias al calibre UN-815 automático que está basado en el ETA 2892-A2, en su versión con certificación COSC. Está disponible en oro blanco y oro rosa, con estas configuraciones y precios:
En oro blanco y correa aligator: 43.250€. Edición limitada a 30 piezas.
En oro rosa y correa aligator: 40.150€
En oro rosa y brazalete también en oro: 58.700€