Vacheron Constantin es Vacheron Constantin, se nota en cada cosa que hace. Para la subasta benéfica del 7 de noviembre no ha preparado un reloj más, sino que presenta una obra de su querida colección Métiers d’Art: el Mécaniques Ajourées for Ony Watch, una adaptación de los relojes lanzados el año pasado basados en la arquitectura, y concretamente éste en las estaciones de ferrocarril del siglo XIX.
El primer reloj creado por Jean-Marc Vacheron en 1755 ya tenía el puente del volante abierto y grabado. Se ve que gustó (y que le gustó) el resultado porque siguió haciendo relojes con partes abiertas hasta que el primer reloj con el calibre completamente esqueletado apareció en 1924, en un reloj de bolsillo. A partir de los años 60 siguió creando movimientos abiertos para relojes de pulsera con todo tipo de complicaciones.
Estamos tan acostumbrados a ver movimientos esqueletados que no caemos en lo complicado que resulta, porque hay que quitar todo el material posible pero sin poner en riesgo el buen funcionamiento del movimiento. Si ya de por sí un calibre tiene un equilibrio delicado, lo es aún más cuando se le quita masa, comprometiendo su estabilidad y haciéndolo más sensible a golpes y vibraciones.
En este Mécaniques Ajourées for Only Watch el calibre 4400 SQ -alojado en una cada de oro blanco de 40 mm de diámetro- tiene la mitad de material que el 4400 sólido. Y en vez de simplemente meter la segueta y cortar trozos de la platina lo que los artesanos han hecho ha sido cortar todo el exterior de la circunferencia para crear una pieza que recuerde a las estaciones de tren del siglo XIX, aplicando el buril para crear arcos, vueltas y revueltas.
De hecho el calibre está lleno de curvas -muy distinto de los esqueletados normales- lo que hace aún más difícil el biselado y grabado y mezclando acabados pulidos y mates para crear un juego de luces y reflejos. Todo ello complementado por otro trabajo artesano: el del anillo rojo que enmarca el movimiento, realizado en esmalte Grand Feu. Si de por sí es una técnica muy difícil lo es aún más siendo un círculo, porque la distorsión de la textura puede ser mucho mayor. Y además en rojo (homenaje a la vida y al valor, como ya sabemos), que es el color más complicado de hacer en este esmalte. A las tres una pequeña placa recoge el nombre/logotipo de Only Watch, con una fuente muy moderna que contrasta poderosamente con el aire del reloj. Por supuesto el reloj, como todos los de Vacheron Constantin, tiene el sello del Punzón de Ginebra.
Ya habíamos visto dos ejemplos de los Métiers D’Art de VC (aquí y aquí) y la verdad es que uno nunca se cansa de tanta belleza relojera (y si, recuerda al reloj de Jaeger-LeCoultre que vimos hace poco).