Omega no para. Si en Baselworld presentó 5 modelos Seamaster ahora nos trae cuatro más: los nuevos Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black. Todos ellos realizados en cerámica y todos con una misma presencia oscura. Vamos a ver su características y precios.
La nueva colección Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black se ha pensado para cubrir el espectro más amplio de gustos, desde lo más deportivo a lo más elegante. Por ello el reloj se puede encontrar con acentos azules, rojos, negro con realces en naranja y por último combinado con oro Sedna (el oro rojo creado por Omega).
La característica principal de estos relojes es que toda la estructura está realizada en cerámica. Eso incluye la caja, de 45,5 y el bisel, pero también la esfera y las coronas. Es la primera vez que se fabrica un reloj completamente cerámico y la verdad es que el resultado es espectacular. La estructura se ha creado a partir del óxido de circonio (ZrO2), conocido como «zirconia». La zirconia se mezcla con elementos estabilizantes para crear una cerámica con una resistencia muy alta a las roturas, además de una baja transmisión térmica. Su dureza es tal que es habitual verla usada en cuchillos o en implantes dentales, lo que da idea de su resistencia a la humedad y las bacterias.
¿Por qué se han elegido los colores rojo y azul? En primer lugar está la idea, como ya he dicho, de apelar a la más amplia gama de gustos posibles. El rojo ha sido siempre un color deportivo, así que no extraña su presencia. También es el primero que se deja de ver en una inmersión: a partir de 5 metros de profundidad pasa a ser negro. Por el contrario el azul, color tradicional en los relojes de buceo, es el último en desaparecer: exactamente el tono de azul que luce el Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black es el que deja de verse cuando se alcanzan los 275 metros de profundidad. Por último, a 300 metros el color del océano es completamente negro.
Tanto en la versión azul como en la roja las inserciones del bisel de cerámica que marcan los primeros quince minutos y el de la válvula de Helio a las 10 horas se han realizado en caucho. En el modelo Black se ha usado Liquidmetal (mezcla de cerámica y metal creado por Omega) y en la vesión de oro Sedna se ha usado Ceragold (mezcla de oro y cerámica).
En las fotos superiores se puede apreciar la forma levemente convexa del cristal del Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black, además de la forma de la correa, que ayuda a que el reloj se asiente de manera correcta sobre la muñeca. Las correas son de caucho con un patrón que recuerda a la tela, mientras que la versión de oro Sedna tiene una correa de cuero pero con tratamiento impermeable e interior de caucho. Todas las correas tienen tratamiento antibacteriano; el cierre desplegable es de titanio cerámico.
En las esferas -pulidas en los modelos Black y Gold y cepilladas en los rojo y azul- hay mucha información, sobre todo escrita: siguiendo la manía de las marcas de escribir un folleto técnico en las esferas de los relojes de inmersión, los Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black ostentan nada menos que ¡8! líneas de texto, sin contar con el logotipo de la manufactura. Es verdad que las líneas están bien equilibradas y no impiden la lectura de la hora, pero un poco de moderación sería de agredecer. De forma discreta también aparece la fórmula del óxido de circonio, que sólo se lee bien al contraluz. Por cierto que también aparece en la trasera del reloj, en una de las asas.
Lo verdaderamente importante, que es la información horaria, no se ve afectada por la literatura de la esfera: la legibilidad es intachable. Tiene unos grandes índices señalados por las agujas con punta de flecha tradicionales en los Planet Ocean, que además son de tamaño perfecto y están hechas en oro blanco u oro Sedna. Los arábigos acompañan al color del reloj: el rojo y azul están pulidos, mientras que en la versión Black y oro están cepillados para ofrecer mejor contraste. Y la aguja del segundero tiene una generosa punta también, fundamental si estamos sumergidos y necesitamos comprobar que el reloj sigue en funcionamiento.
Pero además los Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black son GMT para poder bucear en cualquier parte del mundo sin perder de vista la hora en casa. Para ello se ha incluido un nuevo anillo de segundo huso horario de nueva factura, con los arábigos redimensionados para facilitar su lectura, así como la correspondiente flecha indicadora. Todos los elementos de la esfera y el punto central del bisel rezuman SuperLuminova, con una visión en la oscuridad simplemente perfecta.
El calibre que anima a los cuatro Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black es el Omega Master Chronometer 8906. El nombre nos indica que es un calibre certificado por el Instituto Federal Suizo de Metrología (METAS), que somete a cada reloj a las pruebas más exigentes:
- La función de cada movimiento -ya aprobado por el COSC- cuando se exponga a campos magnéticos de más de 15.000 gauss
- La función de cada reloj completo cuando se exponga a campos magnéticos de más de 15.000 gauss
- Desviación de la precisión cronométrica en 6 posiciones
- Desviación de la precisión cronométrica diaria tras exposición a 15.000 gauss
- La precisión media diaria (a 6 diferentes posturas y 2 zonas de temperatura distinta), entre 0 y más de 5 segundos/día, durante 4 días
- La autonomía (reserva de marcha), determinada en horas por cada modelo de reloj
- La desviación de la precisión cronométrica entre el 100% y el 33% de reserva de marcha
- La resistencia al agua (probada en agua), en bares, determinada por cada modelo de reloj. Omega añade un 25% de resistencia de la nominal
Además el reloj pasa por la certificación COSC y tiene 4 años de garantía. El calibre se mueve a 3,5 hercios (25.200 Alt/h) y tiene 60 horas de reserva de marcha.
Otra innovación de los Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black es que (¡por fin!) los textos en el reverso están correctamente alineados, algo que a algunos nos vuelve locos cuando no ocurre -que es casi siempre-. Esto lo consigue gracias a un sistema de cierre cerámico que han llamado Naiad Lock y con el que se han ganado el cielo. Esperemos que lo vayan incorporando a los demás modelos.
Como siempre ocurre con la casa de Biel, el reloj queda fenomenal en la muñeca. Las correas obligan al reloj a quedar equilibrado sobre el pulso y por tanto se lleva muy bien, a pesar de su tamaño.
Por supuesto va en gustos, pero para mí mis favoritos son sin duda el Black y el de oro Sedna. Yo me imagino que el que más se va a vender es el Black y no por bonito sino por duradero: un negro total no va a pasar de moda. Pero, tal y como se probado en numerosas ocasiones, puedo estar equivocado. Los relojes son más caros de lo normal ( el Planet Ocean GMT de 43,5 mm en acero cuesta 6.700 euros), pero te estás llevando un calibre Master Chronometer, estructura de cerámica, manecillas de oro y GMT. Los Omega Seamaster Planet Ocean Deep Black no llegarán a las tiendas hasta octubre, pero por ahora sus precios son de 10.400 francos para el azul, rojo y negro y de 13.400 francos para la versión en oro. Aproximadamente 9.550 y 13.300 euros respectivamente. Más información en Omega.es.