Otra de las sorpresas de Patek Philippe en Baselworld 2018. Después del impresionante Nautilus calendario perpetuo que vimos en vivo, la manufactura ha sorprendido a todos con este Patek Philippe Aquanaut Chronograph 5968A, que significa el debut de la complicación en la familia Aquanaut. El Aquanaut apareció en 1997, así que 21 años sin un crono se antojaba demasiado tiempo. Así lo ha entendido la casa, que ya ha rellenado ese vacío.
Para la ocasión, la marca se ha desmelenado un tanto y ha aderezado el reloj con una esfera colorida y correas brillantes. Sin embargo, la integración del cronógrafo se ha hecho de forma sutil, sin alterar el estilo general del Aquanaut.
Incluso con la adición de los dos pulsadores del cronógrafo, la forma octogonal de la caja permanece intacta, y la integración, sin ser revolucionaria (en absoluto) es agradable y equilibrada. El Patek Philippe Aquanaut Chronograph 5968A se presenta en acero inoxidable. La caja mide 42,2 mm de diámetro y 11,9 mm de altura, un grosor muy decente para un cronógrafo automático. En general, proporciones deportivas pero equilibradas.
La principal evolución viene de la esfera, pero también en este caso, sin dramatismo y con una inteligente integración de la función de cronógrafo. Utilizando el Calibre CH 28-520 de Patek, el Aquanaut Chronograph sólo presenta una subesfera para el contador de 60 minutos. No hay segundero ni subesfera de 12 horas. Es una elección deliberada que no gustará a algunos, pero al menos la esfera permanece limpia.
En segundo lugar, aunque el patrón cuadrado y el color gris oscuro de la esfera no son nuevos, podemos ver varios toques de naranja tanto en el segundero como en el subcontador y en la pista del segundero en la periferia de la esfera. Una vez más, a algunos les parecerá un poco chillón, pero es bastante refrescante y ofrece un estilo más joven y moderno.
Lo mismo puede decirse de la correa. El Patek Philippe Aquanaut Chronograph 5968A se entrega con dos correas de caucho compuesto: una clásica de color negro y otra mucho más inesperada -y al final bastante atractiva- de color naranja. La correa también cuenta con el último cierre desplegable de Patek. El cierre, que ha costado dos años de desarrollo, está equipado con cuatro cierres para mayor seguridad.
En el interior de la caja del Patek Philippe Aquanaut Chronograph 5968A se encuentra un movimiento muy conocido, el calibre integrado de la casa CH 28-520, con rueda de pilares y embrague vertical. Este movimiento es también un cronógrafo flyback y cuenta con todas las delicias clásicas de Patek, como las tecnologías Spiromax y Gyromax, así como el Sello Patek Philippe, que es la manera que tiene la empresa de certificarse a sí misma.
El Patek Philippe Aquanaut Chronograph 5968A tiene un precio de 43.570 euros, que es sin duda un precio elevadísimo y que va a significar una dura barrera de entrada. En comparación, el Lange 1815 Chronograph de oro que vimos en vivo cuesta 51.000 euros. Y la edición boutique del Audemars Piguet Royal Oak Offshore Chrongraph (también en vivo) cuesta 45.000 euros. Más información en PatekPhilippe.es.