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Oris Big Crown Pointer Date 40mm. Al rojo vivo

Oris Big Crown Pointer Date 40mm

La verdad es que Oris necesita pocos argumentos para gustar: tiene una gama de relojes atractiva, precios razonables (aunque es verdad que no tanto como antes, pero aún así mejores de lo que se encuentra en la industria suiza), y una calidad de construcción que se percibe mayor que antes. Pero es que con el lanzamiento del Oris Big Crown Pointer Date de esfera roja ha dado en la diana, algo cada vez más difícil. Vamos a ver por qué (aunque salta a la vista, está claro).

RAZÓN HISTÓRICA

Aunque hablamos mucho de las colecciones Aquis y Sixty-Five, hay que saber que, antes de que Oris lanzara su primer reloj de buzo en 1965, la casa ya se había hecho un nombre con su reloj de piloto «Big Crown», en 1938. Como su nombre indica venía con una corona agrandada para que los pilotos pudieran manipularla sin tener que quitarse los guantes. Y además añadía la complicación de fecha.

El Pointer Date original del 38

La patente de A. Hammerly de 1915 presentaba la indicación de fecha mediante una manecilla adicional, en vez de la tradicional ventana. La familia Oris Big Crown Pointer Date por tanto tiene toda la legitimidad -y el orgullo- para reivindicar como suya una forma de presentar la fecha que han terminado usando todas las marcas.

COLORES DE ALTOS VUELOS

En 2018, coincidiendo con el 80 aniversario de la colección, Oris adoptó algunas decisiones de marketing muy acertadas. El reloj se presentó en dos medidas (36 y 40 mm), en acero y en bronce, y con una selección de colores de esfera muy atractivos. Especialmente un dial de un verde ligero, inspirado en un color de la Policromía de Arquitectura de Le Corbusier. La variedad de tamaños, materiales y colores insuflaron aire fresco a la colección.

GANAS DE VINTAGE

El color rojo cereza (o, poniéndonos dramáticos, rojo sangre), que es técnicamente un color rojo oscuro con tonos marrones (no confundir con el borgoña), marca perfectamente las notas vintage. Las manecillas de catedral y la estilizada tipografía elegida para los numerales arábigos son los clásicos de los primeros relojes de piloto. La legibilidad es imprescindible, y el fondo rojo contrasta muy bien con todas las marcas. Y para mejorarla aún más, los numerales y manecillas están tratados con Super-LumiNova beis. La manecilla adicional para el calendario presenta una punta de flecha invertida, que se mueve a lo largo de la esfera señalando cada día.

MISMAS ESPECIFICACIONES

En el resto de prestaciones el Oris Big Crown Pointer Date retiene las mismas especificaciones de sus compañeros de nombre. La caja es de 40 mm con superficies pulidas y cepilladas, el bisel acanalado (que también aparece en la trasera) y por supuesto incorpora la gran corona (¡no es un Big Crown si no tiene Big Crown!). En conjunto el reloj está agradablemente terminado y tiene la misma sensación de buena relación calidad/precio de todo lo que hace Oris.

La trasera del reloj, descubre el calibre Oris 754, que es el Sellita SW200-1 modificado internamente para añadirle la fecha. También se le añade el rotor bidireccional en rojo, tradicional de la casa. El movimiento tiene una escasa reserva de marcha de 38 horas y un afrecuencia de 28.800 horas. Un motor robusto, fiable y fácilmente atendido en todas partes para mantener el precio bajo control.

POR ÚLTIMO

Este color funciona tan bien que no sería de extrañar que también hubiera un Oris Big Crown Pointer Date de 36 mm. Es atrevido, atractivo e inusual, una tentación para todos aquellos que ya están un poco cansados del azul, y que pueden encontrar en el rojo una opción distinta (como ocurre con el Rado Golden Horse).

El reloj viene con una correa chamois de ciervo marrón, a la que se puede añadir una hebilla o un cierre plegable. Su precio es de 1500 euros, y hay más información en Oris.es.

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