Los Legacy Machine de MB&F son los relojes más clásicos de la casa, si sabemos lo que significa clásico en este caso: desde el más absoluto respeto por la tradición creativa de la relojería, buscar nuevas formas de expresión que mantengan la conexión histórica. Como ejemplo valga el LM Thunderdome que vimos aquí, una belleza ultramoderna que a la vez está claramente anclado en la tradición. Y qué más relojero y tradicional que un calendario perpetuo.
En 2015 MB&F presentó el Legacy Machine Perpetual, y desde entonces lo hemos visto en oro rojo, platino, oro blanco y titanio. Ahora vemos el MB&F LM Perpetual en oro amarillo y esfera azul. Otra complicada preciosidad.
El MB&F LM Perpetual atesora un calibre de 581 componentes completamente integrado con un sistema revolucionario, inédito hasta la fecha, para calcular el número de días de cada mes. Fue desarrollado por el relojero escocés Stephen McDonnell, un tipo estupendo con quien tuve oportunidad de charlar un buen rato y que tuvo la santa paciencia de explicarme por qué su calendario es distinto.
El calendario perpetuo es capaz de calcular la complejidad aparentemente arbitraria de las variaciones de los días de cada mes, incluyendo los 29 días de los meses de febrero de los años bisiestos. A pesar de ello, los calendarios perpetuos tradicionales cuentan con una serie de limitaciones: la fechas pueden saltar, es relativamente fácil que sufran daños si se realizan ajustes durante el cambio de fecha y las complicaciones suelen estar compuestas por una especie de módulo controlado por movimientos base.
Los mecanismos de los calendarios perpetuos tradicionales emplean como base un mes de 31 días y «eliminan» cualquier fecha superflua para los meses con menos días. Para ello, utilizan un sistema que se salta las fechas innecesarias. Por ejemplo, al cambiar del 28 de febrero al 1 de marzo, los calendarios perpetuos tradicionales pasan rápidamente por el 29, el 30 y el 31 hasta llegar al día 1 del mes.
El MB&F LM Perpetual reinventa el calendario perpetuo tradicional reemplazando la arquitectura de grand levier (gran palanca, en francés), que ocupa un gran espacio, por un «procesador mecánico». El procesador mecánico emplea por defecto un mes de 28 días y le añade los días que necesite. De este modo, los meses siempre tienen el número exacto de días requeridos, sin necesidad de pasar hacia adelante o saltarse los días sobrantes. Las fechas ya no saltan, el mecanismo no se obstruye y los pulsadores de ajuste se desactivan automáticamente cuando cambia el calendario. Se evitan así los problemas tradiconales.
En los calendarios perpetuos, solamente es posible llegar a los años bisiestos pasando por 47 meses. LM Perpetual, no obstante, cuenta con un pulsador de configuración que sirve exclusivamente para ajustar el año.
La belleza mecánica del MB&F LM Perpetual se revela a través de su esfera abierta que permite contemplar la complicación en todo su esplendor y el volante suspendido, un espectáculo que acapara toda la atención del espectador. En un interesante giro técnico, la llamativa espiral que planea por todo lo alto está conectada al escape en el dorso del movimiento en lo que parece ser el eje de volante más alargado del mundo.
Gracias al innovador sistema diseñado especialmente para la Legacy Machine Perpetual, las subesferas parecen «levitar» por encima del movimiento, sin fijaciones visibles. Las subesferas esqueletizadas descansan sobre una serie de pitones ocultos, lo cual resulta técnicamente imposible en los mecanismos tradicionales de calendario perpetuo debido a que obstaculizarían el movimiento de la grand levier.
El MB&F LM Perpetual no es una edición limitada salvo porque la producción es muy pequeña y lleva tiempo. Además de esperar te debes separar de 147.000 euros + IVA, que es su precio. Un auténtico sueño. Más información en MB&F.com.
