Yo creo que en casos como el de este Breguet Classique Tourbillon Extra-Plat 5367PT bastaría con poner las fotos y ni una sola palabra, porque la belleza se contempla en silencio y siempre que tratas de plasmarla en palabras el resultado es siempre inferior a lo que se contempla. Y con Breguet ocurre eso muy a menudo. Así que creo que lo mejor que puedo hacer es poner en contexto el reloj y dejar que el lector disfrute de las fotos.
La verdad es que este Breguet Classique Tourbillon Extra-Plat es como un compendio de lo que significa la marca Breguet, porque todos los elementos que vemos en el reloj, tomados de uno a uno, son rasgos distintivos de la casa.
Por supuesto el primero y más importante es el tourbillon, el mecanismo que trataba de contrarrestar el efecto de la gravedad sobre el volante en los relojes de bolsillo, que siempre estaban en la misma posición. Es un mecanismo innecesario hoy en día, pero la belleza de su desempeño y la complicación que significa su construcción lo ha convertido en una de las altas complicaciones favoritas de los aficionados.
En este Breguet Classique Tourbillon Extra-Plat el tourbillon aparece descentrado en la esfera, una característica singular que no es extraña en la casa.
Apareció por primera vez en 2013 con la referencia 5377 y con caja de oro rosa. Lo vimos con fotos en vivo aquí. Al año siguiente apareció una versión en platino (que presentamos aquí) que incluía un indicador de reserva de marcha.
Por último, el año pasado presentó el Squelette que vemos aquí, una impresionante pieza que pude disfrutar en mi visita a la manufactura Breguet.
Otro de los relojes que pude disfrutar fue el Classique Grand Feu Blue Enamel -es decir, esmalte azul-, que es la base sobre la que se ha construido este Breguet Classique Tourbillon Extra-Plat.
Está construido con una caja de platino de 41 mm de diámetro, con el canto acanalado tradicional y cristal de zafiro.
La esfera tiene es azul profundo de la versión sin tourbillon y, como todo en Breguet la esfera se ha hecho enteramente en la casa. Empieza siendo una placa de oro blanco, sobre la que se aplica el esmalte líquido. Después comienza un proceso de horneado a más de 800º, tras el cual se vuelve a aplicar esmalte y se vuelve a hornear. Así varias veces hasta conseguir el azul deseado. El procedimiento termina con un pulido suave, seguido de una última cocción que confiere a la esfera un brillo natural.
Luego, los elementos de oro de la esfera reciben un fino acabado achaflanado, realizado en un taller especializado dedicado a este otro oficio artístico exclusivo. A continuación se aplican los distintos indicadores de la esfera.
Bajo la esfera se mueve el calibre 581. Es el movimiento de tourbillon más fino de Breguet: no supera los 3 mm, para un grosor total de caja de 7,45 mm. El tourbillon, ubicado entre las 4 y las 6 horas, se alberga en una jaula de titanio que contiene un escape desarrollado a medida, así como un volante Breguet con espiral de silicio. Este último oscila a una frecuencia de 4 Hz, particularmente elevada para un volante de tourbillon. En cuanto a la reserva de marcha, el Breguet Classique Tourbillon Extra-Plat Automatique 5367 goza de una autonomía de 80 horas, que se ha logrado gracias a un barrilete de “elevada energía”, un diseño patentado.
Como ocurre con otros relojes de esmalte azul, el Breguet Classique Tourbillon Extra-Plat es una versión que se vende sólo en boutiques de la marca. Tiene un precio de 159.900 euros, que lo pone un poquito fuera de nuestro alcance, desafortunadamente. Más información en Breguet.es.
