Ya es una tradición: el 1 de diciembre, como debe ser, comienza el calendario de adviento de Nomos, que cada día sortea en su web un regalo distinto de entre los accesorios que tiene la casa en su tienda, que son todos de muy buen gusto (o a mí al menos me lo parece). Es una buena herramienta de marketing, no cabe duda, pero también forma parte de la cultura y la tradición alemana: el Calendario de Adviento debe su origen a una costumbre de la iglesia protestante alemana del siglo XIX, según la cual los niños encendían una vela desde el primer domingo de Adviento hasta el día 24 de diciembre. Por cierto que el Adviento nada tiene que ver con las corrientes de aire en la naturaleza, sino que viene del latín adventus, que significa llegada. Por eso las velas, para iluminar el camino hasta la llegada.
Para participar en el calendario de Adviento de Nomos lo único que hay que hacer es ir a la página de portada de la casa y buscar el número de día correspondiente, hacer clic y ver el regalo. Si estamos interesados (y quién no lo está, con lo chulos que son) sólo hay que dejar la datos de contacto y, si resultamos ganadores, la propia Nomos se pondrá en contacto con nosotros para enviarnos el regalo. Y, seamos sinceros, a todos nos hace ilusión pensar que oye, por qué no me va a tocar a mí.
Además, en la mayoría de los casos, si son artículos del calendario de Adviento de Nomos que están disponibles en la tienda online, se pueden adquirir aparte. Que no es lo mismo que si te toca, pero puede ser un consuelo. Yo no sé qué regalos va a haber, pero ya sólo con el de hoy (una caja de madera para guardar seis relojes) merece la pena acercarnos a ver. La propia Nomos deja intuir que se va a regalar algún reloj, ¡y eso ya son palabras mayores! Y además en español.
En fin, si participáis, mucha suerte. Yo ya lo he hecho. Está aquí: Calendario de adviento de Nomos.