Debe ser por esto de que es un reloj para una Olimpiada que la marca ha corrido tanto para lanzar este Omega Seamaster Diver 300M Beijing 2022 Special Edition. No se sabe aún si vamos a tener Juegos Olímpicos de Tokio (para el cual Omega ya lanzó este reloj), pero es de esperar que las de deportes de invierno, que se celebrarán en Pekín en febrero del año que viene, sí que puedan ocurrir. Así que, ante la incertidumbre que hay con el acontecimiento de Japón, que impide lanzar más modelos conmemorativos, entiendo que la casa ha optado por agitar el mercado con este reloj.
Recordemos, además, que -como expuse en el artículo sobre las ventas de relojes– el único mercado que está comprando relojes ahora mismo es el Chino, así que por qué no aprovechar el tirón para lanzar un reloj que entiendo tiene su público objetivo mayoritariamente en ese país.
Técnicamente, el nuevo Seamaster Diver 300M “Beijing 2022” Special Edition está muy cerca del “reloj Bond” original que presenté en vídeo, con el que comparte tanto sus proporciones como su mecánica. Para esta ocasión, Omega, sin embargo, incorpora varias actualizaciones visuales para distinguir a este modelo. La caja de acero inoxidable tiene 42 mm de diámetro y conserva la misma combinación de superficies cepilladas con detalles pulidos. También mantiene sus exclusivas asas en forma de lira, la corona atornillada y la válvula de escape cónica de helio a las 10 en punto, así como la hermeticidad que da nombre al reloj, de 300 m de resistencia al agua.
Como novedad en esta edición especial «Beijing 2022», el bisel dodecágono está realizado en titanio de grado 5 con una escala de inmersión de 60 minutos en relieve positivo, obtenida mediante un proceso de ablación con láser, un estilo que comparte con la reciente edición de Nekton que vimos con fotos en vivo.
Esta Omega Seamaster Diver 300M Beijing 2022 trae el clásico brazalete de acero inoxidable pulido y cepillado, equipado con el cierre plegable y extensible patentado de Omega, con una extensión adicional para el buzo. Robusto y cómodo, el brazalete complementa el reloj en términos de solidez y estilo. Otra actualización se refiere al fondo de caja. En lugar de zafiro, el reloj está equipado con una parte trasera de acero sólido que está decorado con un emblema de los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022 estampado. El fondo de caja es un «NAIAD LOCK», el sistema creado por Omega que consigue que las inscripciones siempre permanecen rectas.
Bajo la tapa trasera se encuentra el calibre Omega 8800 de la marca, un movimiento automático moderno y de alto rendimiento con certificación Master Chronometer, impresionante resistencia a los campos magnéticos y gran precisión. El movimiento, equipado con el escape coaxial de la marca y un volante de silicio, late a 3,5 Hz y almacena hasta 55 horas de reserva de marcha.
La otra característica única de este Seamaster es su esfera. Aunque está hecha de cerámica ZrO2 y conserva el icónico patrón de ondas grabado con láser que ha sido el sello distintivo de este reloj desde la década de 1990, la esfera tiene un nuevo tono azul y ahora se ha añadido un patrón de rayos de sol. Además, 5 de los índices aplicados (a las 2, 4, 8, 10 y 12 en punto) están coloreados para recordar los 5 colores de los Anillos Olímpicos, algo que ya hizo en el Seamaster 300 para las Olimpiadas de Río que vimos en vídeo (aunque en ese caso fue en el bisel). Todos los elementos de la esfera están recubiertos con Super-LumiNova y la fecha se coloca a las 6 en punto.
El Omega Seamaster Diver 300M “Beijing 2022” Special Edition (ref. 522.30.42.20.03.001) se entrega en un estuche creado para la ocasión, y es una edición especial pero no limitada. El precio está fijado en 6.100 Euros. Estará disponible en tiendas a partir de abril de 2021. Más información en Omega.es.
