Qué gusto da ver a Girard-Perregaux lanzar una nueva versión de su clásico más conocido, el tres puentes. En los últimos tiempos ha cargado mucho la mano sobre el Laureato, cuya presentación vimos en vivo en 2016 y del que ha sacado numerosas versiones. Es comprensible porque la casa necesita un reloj que tire del carro de las ventas y eso, con relojes como este Girard-Perregaux Tourbillon con Tres Puentes Volantes, cuyo precio está por encima de los 150.000 euros, no es fácil.
También es verdad que un elemento de diseño que constriñe mucho las posibilidades creativas, en tanto en cuanto los tres puentes necesitan mucho espacio en la esfera y por tanto no es fácil ser original a su alrededor porque queda poco espacio para añadir cosas. En 2014 con el Neo-Tourbillon que vimos aquí el diseño dio un salto al evolucionar sus formas y materiales, lo que abrió nuevas posibilidades estéticas. Y, sin duda, la que tenemos aquí es impactante.
Cierto es que el concepto no es totalmente nuevo, porque hace unos meses la casa presentó el Girard-Perregaux Tourbillon con Tres Puentes Volantes Aston Martin Edition, desarrollado en colaboración con la casa automovilística inglesa y construido en titanio recubierto de DLC negro:
La novedad de esta versión del Tres Puentes es la caja de oro rosa, con superficies cepilladas y pulidas. Con 44 mm de diámetro y 15,52 mm de altura, es ciertamente un reloj bastante grande, pero sigue pareciendo relativamente ligero en la muñeca debido al espacio abierto bajo el cristal. Buena parte de la altura, sin embargo, se la llevan los dos cristales de zafiro con forma de caja, por lo que la sensación en la muñeca no es la de llevar un ladrillo.
La hora se indica con agujas esqueletadas de estilo Dauphine, que casi flotan libremente sobre el movimiento completamente calado que hay debajo.
Para mantener la vista del movimiento calado lo más despejada posible, los marcadores de hora están fijados al interior de la banda de la caja. La ausencia de bisel y el uso de cristales de zafiro en caja permiten una visión sin obstáculos del movimiento.
Continuando con las sorpresas, hay que señalar que este Girard-Perregaux Tourbillon con Tres Puentes Volantes es un reloj automático, porque la manufactura, tirando de esa habilidad tan grande que tiene, ha ocultado hábilmente el microrrotor bajo el barrilete. El calibre de la casa GP09400-1683 cuenta con un escape de tourbillon de un minuto y está suspendido entre los tres puentes.
Los puentes del anverso son de oro recubierto con PVD negro, mientras que el reverso de cada uno es de titanio recubierto de PVD negro. El movimiento funciona a una frecuencia de 21.600 alternancias a la hora y tiene 60 horas de reserva de marcha con toda la cuerda dada.
El Girard-Perregaux Tourbillon con Tres Puentes Volantes en oro rosa está disponible a un precio de 130.000 euros, aproximadamente. Se presenta con una correa de aligátor negra con efecto de caucho en una hebilla desplegable de oro rosa de 18 quilates, además de una correa adicional de piel de aligátor negra con efecto de oro. Una pieza absolutamente exclusiva, como también lo es su concepción y ejecución. Más información en Girard-Perregaux.com.