Una nueva colaboración de Hamilton con el mundo del cine, y ya van más de 400. Esta vez le toca a Independence Day 2 Resurgence, el más que seguro éxito que se estrena el día 1 de julio en España. El reloj del protagonista es el conocido Hamilton X-Wind Auto Chrono. Vamos a repasar sus características y precio.
El Hamilton X-Wind Auto Chrono es un viejo conocido de la cartera de la casa suiza de orígenes norteamericanos. Lleva unos cuantos años en el mercado y sigue siendo un éxito, porque ha sabido combinar el aspecto vintage de los relojes de piloto con una presencia poderosa.
El Hamilton X-Wind Auto Chrono tiene una caja de 44 mm de diámetro y aproximadamente 16 de altura, lo que le convierte en un cronógrafo con una presencia considerable. Su peso también es notable, pero en la muñeca queda bien equilibrado y por tanto te haces pronto con él. Pero desde luego te vas a dar cuenta que no te lo has puesto o, al contrario, vas a notarlo cuando te lo quites.
La caja presenta tres coronas, dos a la derecha y una a la izquierda. En este lado además están los pulsadores del cronógrafo. Las coronas de la derecha controlan un bisel interior que se desliza en circunferencia y en conjunto con una escala en rojo que aparece en la ventana. Es una herramienta que sirve para calcular los ángulos de deriva que producen los vientos cruzados (origen del nombre X-Wind). Honestamente no sé cómo funciona, pero tengo un par de amigos pilotos que le gusta mucho esa función del reloj. Por supuesto en estos días la función carece de utilidad para los pilotos, pero le aporta una savia retro que lo hace sobresalir por encima del común de los relojes de piloto del mercado.
A la izquierda se alojan una corona central que se utiliza para la puesta en hora y el ajuste del día y la fecha y los botones del cronógrafo. Éste no es un reloj para zurdos y sin embargo la configuración del reloj está invertida. Así, el botón de puesta en marcha y parada del cronógrafo está a las 8, mientras que el de puesta a cero está a las 10.
Es decir, justo al contrario de como uno lo haría instintivamente. Y la primera función al tirar de la corona central es la puesta en hora, y al sacarla del todo se cambia el día y la fecha. Otra singularidad que identifica al Hamilton X-Wind Auto Chrono. Además los pulsadores del cronógrafo forman una X con las coronas de enfrente.
La parte superior añade un bisel bidireccional que actúa como taquímetro. El reverso muestra una gradación angular para la inclinación en vuelo; otro cálculo absolutamente innecesario hoy en día, pero todo un detalle por parte de su creador. La ventana inferior permite ver el eterno calibre Valjoux 7750 y el rotor con el nombre de la casa grabado.
La esfera del Hamilton X-Wind Auto Chrono tiene un fondo negro, al que por cierto le beneficiaría un cristal de zafiro con un recubrimiento antirreflectante más efectivo. Pasan muchas cosas en la esfera pero al ser un reloj relativamente grande hay espacio suficiente para todo sin que la información se apelmace. Los contadores del cronógrafo, de 30 minutos y 12 horas, se sitúan al sur y al norte de la esfera respectivamente.
Se han construido en gris y con un guilloché circular para que destaquen sobre el negro. El pequeño segundero por su parte también comparte decoración, pero esta vez en negro. Los numerales arábigos están satinados, una buena elección para que capten bien la luz y favorezcan la lectura.
Las manecillas horarias y los puntos luminiscentes dan el toque vintage. En ambos casos creo que un mayor tamaño habría favorecido la legibilidad. Eso es especialmente notable en la oscuridad, donde el reloj adolece de una luminosidad no todo lo fuerte que debería ser en los índices. A cambio las manecillas de los contadores del cronógrafo -además por supuesto de la del pequeño segundero- están también tintadas de SuperLuminova, algo no muy habitual.
Como he dicho al principio el reloj tiene un buen equilibrio sobre la muñeca, por lo que no se hace difícil llevarlo a pesar de su tamaño. El reloj se sujeta a la muñeca con una correa potente, ancha y en color natural y pespuntes blancos, sujeta con una doble hebilla. Curiosamente el peor enemigo de las correas, el mucho uso, le va a sentar estupendamente al reloj porque al aviejarse va a aumentar su aire de reloj de aviador clásico.
Mi muñeca tiene 18 cm de diámetro, así que mejor no enfrentarla a cajas demasiado grandes. Sin embargo en este caso se puede ver cómo el reloj queda bien puesto sin parecer demasiado grande.
Además el precio es muy atractivo: por 1.345 € te llevas un reloj multifunción con un diseño poco habitual y un calibre a prueba de bombas. Si te gustan los relojes de piloto pero también eres de los que le gusta cuidar su dinero, este Hamilton X-Wind Auto Chrono es un opción que deberías considerar.
Por cierto que en Independence Day 2 aparecen más relojes Hamilton: Jeff Goldblum lleva un Jazzmaster Automatic GMT (que repasamos en vídeo en este artículo), Bill Pullman lleva un Thin-O-Matic y James A. Woods lleva un Khaki Pilot Automatic Chronograph como el que aparece en la foto. Hay que tener mucho ojo para verlos mientras discurre la película. Excepto el Hamilton X-Wind Auto Chrono, que se muestra claramente en uno de los momentos álgidos de la película.
Por cierto que si te gustó la Independence Day original de 1996 te gustará esta también porque es básicamente la misma historia pero mucho más espectacular. Yo desde luego prefiero el reloj. Más información en Hamilton.es.