Ahora que estamos en medio de la terrible pandemia provocada por el Covid-19 es cuando nos damos cuenta de cómo algo que damos por supuesto (la sanidad, los médicos, las medicinas, una simple mascarilla) se convierte en lo único importante. Llamamos héroes a los sanitarios que nos cuidan y curan cuando tenemos el virus porque sus gobiernos los fuerzan a trabajar sin protección, cuando ellos preferirían que los llamaran trabajadores como el soldador que lleva protección para los ojos o el que limpia fachadas bien sujeto con cuerdas. Si esto es así en occidente, cómo será en los países menos favorecidos, esos que sólo salen en la televisión cuando mueren más de 1.000 personas en dos o tres días (si son más días ya entra dentro de lo normal y no es noticia).
Médicos Sin Fronteras fue fundada en París en 1971 por doce médicos y periodistas. Hoy en día, esta organización galardonada con el Premio Nobel trabaja en todo el mundo para ayudar a personas de unos 70 países, independientemente de sus creencias religiosas, culturales o políticas. Nomos lleva colaborando con Médicos sin Fronteras desde 2012, y ha vendido más de 8.000 relojes desde entonces y de esas ventas ha donado una parte a la organización. En el caso de este Nomos Ahoi Datum Médicos sin Fronteras la cantidad donada es de 250 euros por cada uno de los relojes.
Hay dos modelos de estos Nomos Ahoi Datum Médicos sin Fronteras: uno de 36,3 mm de diámetro y 9,6 mm de altura, que son una medida tradicional de Nomos. Este modelo es un neomatik, llamado así por el calibre de manufactura que desarrolló la casa y que repasamos en vídeo. Está equipado con el calibre DUW 3001 y tan sólo tiene 3,2 mm de altura, una proeza auténtica para una pequeña manufactura como es Nomos. Y está así de bien hecho:
Pero en este caso el Nomos Ahoi Datum Médicos sin Fronteras se presenta con el brazalete desarrollado por la casa que vimos en vídeo, y que es excelente. El reloj es una edición limitada a 250 unidades y tiene un precio de 3.440 euros.
Pero el modelo que creo yo va a tener más aceptación es el que tiene un diámetro de 40,6 mm de diámetro y 10,6 mm de altura. En este caso el reloj integra el calibre 5101, que presenta el sistema de fecha patentado por la casa que vimos en vídeo. También es una edición limitada a 250 unidades y el precio es de 3.780 euros.
Los dos relojes llevan la inscripción Ärzte ohne Grenzen (es decir, Médicos sin Fronteras en alemán), tanto debajo de las 6 en punto como en la trasera del reloj. Además lleva la indicación xx/250 grabada. Y el numeral 12 está pintado en rojo porque ese es el color de Médicos sin Fronteras (y el de la ayuda, de ahí la Cruz Roja).
Además del cristal de zafiro, los relojes llevan una corona atornillada con protectores porque son herméticos hasta 200 metros, algo no muy habitual en este tipo de relojes. Las manecillas y los cuadrados por encima de los numerales están recubiertos con Super-LumiNova.
Es importante recordar que los relojes de Nomos se pueden comprar a plazos sin recargo. Más información en Nomos.es.