El uso de oro de origen 100% ético no es un relámpago inesperado, sino una proceso que viene de lejos. En 2010 Chopard se unió al Consejo de la Joyería Responsable, del que es miembro certificado desde 2012. En 2013 lanzó el llamado “Viaje al Lujo Sostenible”, forjando un alianza filantrópica con la influyente ONG minera sudamericana, la Alianza para la Minería Responsable (ARM).mejorando los procesos de adquisición y producción para crear una cadena de suministros responsable desde la mina hasta el producto. No es algo baladí este compromiso, y seguramente tampoco provocará un seguimiento masivo entre las demás empresas del sector.

¿Por qué? Pues porque siempre se ha tenido la idea de que el lujo está por encima de lo que pasa en el mundo real. Cuando vemos una película de “amor y lujo” presenciamos un mundo en el no existe nada parecido a problemas sociales, carestía de agua ni cosas así. Se derrochan maneras de satisfacer nuestro apetito por el exceso o el placer puro, y nos encanta. La industria del lujo alimenta esa idea porque es su esencia, e incluso ha pasado por encima de hechos palmariamente injustos (recordemos los tristemente famosos “diamantes de sangre”).

Lingotes de oro 100% Ético

En 2014, casi al principio de Horas y Minutos, ya publiqué un artículo sobre el caso de Chopard y la conciencia social. Comentaba entonces cuánto mérito tenía una acción claramente menos beneficiosa para la empresa que seguir como hasta entonces. La noticia pasó entonces sin pena ni gloria (como la propia web en aquel entonces, que hay que decirlo todo). Tiempo después tuve la suerte de poder visitar la manufactura (aquí está el reportaje sobre la visita) y ver cómo se trabaja el oro 100% ético. Por aquel entonces Chopard ya presentaba relojes y joyas de oro 100% ético, como la Colección Palme Verte, las primeras líneas de difusión fabricadas con oro Fairmined; los primeros relojes del mundo de oro Fairmined en la Colección L.U.C; sin olvidar la mítica Palma de Oro, que ha sido fabricada con oro Fairmined desde 2014.

En 2017 Chopard lanza también la nueva Colección Ice Cube, una línea de joyería de difusión fabricada con oro Fairmined. Aún así, encerrada en una pequeña sala de la manufactura, la fundición parecía como el taller de esos científicos locos que crean sus genialidades al margen de orden mundial.

Ópalos de la colección Green Carpet

Ahora ya no. Toda la producción de Chopard va a ser, a partir de julio de 2018, realizada con oro 100% ético. Y, no es una producción pequeña. Y aunque lo fuera no deja de ser admirable ese compromiso que a otros les resultaría un incordio. Particularmente cuando lean las declaraciones de Caroline Scheufele, copresidenta y directora creativa de Chopard y ya premiada por su labor: “Como empresa familiar, la responsabilidad y la ética siempre han formado una parte importante de nuestra filosofía familiar. Naturalmente, siempre hemos colocado a la ética en el centro de los valores de Chopard. El auténtico lujo solo se da cuando conoces cada uno de los eslabones de tu cadena de suministro y estoy muy orgullosa de nuestro programa de adquisición del oro. Como Directora Creativa de la marca estoy muy orgullosa de compartir con nuestros clientes la historia que se encuentra detrás de cada una de nuestras maravillosas piezas con nuestros clientes y de saber que van a llevar estas historias con orgullo”.

Seguramente si Chopard anunciara que va a dejar de usar piel de cocodrilo en sus correas (que no sé por qué no lo hacen las empresas ya, la verdad) la noticia tendría más resonancia porque nos preocupan más unos animales -que al fin y al cabo son endémicos de Estados Unidos- que unos mineros perdidos en Hispanoamérica. Pero yo no dejo de aplaudir una iniciativa que realmente les honra. Y espero que sepan comunicarla bien, porque las generaciones más jóvenes de gente con dinero sí son más sensibles a los temas sociales, y saber esto podría decantar una decisión de compra. Ojalá sea así. Más información en Chopard.es.

Caroline y Karl Scheufele con Livia Firth a la derecha (fundadora de directora creativa de Eco-Age Limited) y su marido Colin Firth a la izquierda