Nomos Glashütte Autobahn: vídeo, fotos en vivo y precio
La manufactura se acerca al mundo de la velocidad sin perder su esencia
Los que seguís Horas y Minutos sabéis lo mucho que me gusta Nomos Glashütte, en cualquier aspecto: por encima de todo sus diseños y su calidad, y además por su comercialización, que siempre ha sido clara y sobre todo apostando por lo digital. Las colecciones de Nomos han permanecido prácticamente iguales durante años, variando colores, tamaños y, sobre todo, introduciendo un calibre completamente de manufactura que ya hemos visto en vídeo aquí. Pero este año en Baselworld ha presentado un nuevo calibre automático, el DUW 6101, que es igual de bueno que el anterior pero que añade fecha bidireccional. Y lo celebra por un lado con la actualización de modelos ya existentes, que se llaman Nomos Update y que se pueden ver aquí con fotos en vivo, y por otro con los nuevos Nomos Glashütte Autobahn.
En cuanto que los Nomos Glashütte Autobahn se mostraron en público se creó una polémica, de esas que tiene mucha trascendencia para los que seguimos este mundo pero cero importancia fuera de él. Las opiniones en contra se centran en que es un diseño que se aparta del tradicional de la casa. A mí esto es algo que me sorprende mucho, pero es que a menudo los que escribimos de relojes nos volvemos unos beatos insufribles que imparten certificados de qué es correcto, qué se ajusta a los criterios que nosotros mismos hemos creado y cómo de altas tienen que ser las llamas de aquellos que no se avengan a la ley. No es nada raro oír decir que tal o cual marca hace siempre lo mismo, pero si de repente lanza un modelo que se sale de la vereda que los periodistas hemos marcado, ¡ay amigo! Prepárate para un sermón que justifique la pira funeraria.
Nomos se fundó en 1990 y, como he dicho, su colección ha sido en general estable durante estos años. ¿Alguien se imagina a un artista haciendo lo mismo una y otra vez durante décadas? Yo creo que salvo a los Rolling Stones, eso no le funciona a nadie. Si haces una y otra vez lo mismo acabas por ser intrascendente. Así que a mí me parece muy bien que Nomos apueste por nuevos diseños que amplíen el número de clientes. Otro de los argumentos de los puristas es que los Nomos Glashütte Autobahn son muy grandes porque miden 41 mm de diámetro. Aparte de que Nomos ya tenía relojes de más de 40 mm de diámetro (como se puede ver aquí), es precisamente el hacer tamaños más actuales lo que puede hacer que más gente se sienta atraída a la marca. Los relojes de 35 mm están muy bien, pero resultan pequeños para mucha gente (especialmente en el mercado norteamericano), así que no hay nada malo en que los relojes crezcan. Así que mejor ver los relojes en vivo y que cada uno se forme su propia opinión.
Como he dicho la caja es de 41 mm, pero sin embargo tiene sólo 10,5 mm gracias a lo delgado del calibre. Y es hermética hasta 100 metros, lo que permite nadar con el reloj puesto sin problemas. En los tres modelos toda la caja y las asas -que forman parte de la carrura- está pulida a espejo. La esfera sí que es distinta, y se presenta en tres variantes: blanco, gris deportivo y azul noche, según los nombre dados por la propia marca.
A primera vista se podría decir que está basada en el modelo más querido de la manufactura, el Tangente, pero en los Autobahn los numerales son distintos, más redondeados. Como el reloj está inspirado en los automóviles la esfera presenta primero y por encima de todo una banda que va desde las 8 a las 4, impregnada de Super-LumiNova, de manera que recuerda a un velocímetro. El efecto es especialmente notable por la noche, cuando pasa por delante la manecilla de las horas. Por eso extraña que una de las versiones, la de la franja azul y la manecilla naranja, la aguja no tenga tratamiento luminiscente.
Una de las características más peculiares del reloj es la manecilla de los minutos. Es muy delgada, hasta el punto de que a primera vista se puede confundir con el segundero, especialmente porque lleva la punta pintada. Que por cierto no es fluorescente, lo que resulta también raro. Pero esta es una opción de diseño para que la manecilla recuerde a los cuentarrevoluciones de los coches. Y lo cierto es que, tras el momento inicial, no cuesta nada hacerse a la lectura del reloj.Otra de las quejas que oigo es que con manecillas tan delgadas no se puede leer la hora mientras vas conduciendo. ¡Es que mientras se conduce no se mira el reloj de la muñeca! Te obliga a quitar la mano del volante y adaptar la mirada a la escasa luz que hay en el reloj (por fuerte que sea la Super-LumiNova), y eso es muy peligroso. Mejor echar un vistazo al reloj del coche, que es más grande, está iluminado y se lee instantáneamente.
La venta de fecha es triple, lo que recuerda a los cuentakilómetros antiguos (como ya vimos en los relojes de REC). En la ventana de fecha se puede ver lo gruesa que es la esfera. Esto es así porque el creador de los Autobahn, el conocido diseñador Werner Aisslinger, quiso dotar a la esfera con formas curvas que recuerdan a los circuitos de carreras. El resultado es en mi opinión excelente porque le da mucho dinamismo y elegancia a la vez.
El calibre DUW 6101 es heredero de todas las cosas buenas que tenía el calibre neomatik: altura de sólo 3,6 mm, 4 hercios de frecuencia, parada de segundero, cuerda manual y 42 horas de reserva de marcha. Además el nuevo sistema de fecha -patentado- tiene salto rápido (es decir, no está cambiando durante horas) y se puede ajustar hacia adelante y hacia atrás, algo muy inusual en relojes mecánicos de este nivel de precio.
Como siempre en Nomos el calibre no es sólo bueno técnicamente, sino que además está fantásticamente decorado, con nervaduras Glashütte, tornillos azulados, y aún más importante, ajustado en 6 posiciones, una más de las exigidas a los cronómetros certificados y que garantiza su precisión.
Los Autobahn se presentan con una correa de tela de muy buena calidad. La verdad es que conociendo las excelentes correas de cuero que tiene Nomos yo creo que preferiría una de ellas, pero lo bueno es que se pueden comprar aparte.
Y hablando de precios, los tres Nomos Glashütte Autobahn tienen el mismo precio: 3.800 euros, lo que le convierte en el modelo más caro de la casa si excluimos los GMT y los modelos en oro. Veremos cuál es la respuesta del mercado, pero el reloj tiene argumentos de sobra para triunfar. Más información en NomosGlashütte.es.