Se podría pensar que IWC nació como una casa especializada en relojes de piloto. Los hace tan bien y son tan populares que llegan a hacer sombra al que seguramente es el icono de la marca: el Portugieser. Además los ha desarrollado con todo tipo de complicaciones: tiene un interesantísimo GMT que vimos en vídeo, un calendario perpetuo -el último de los cuales vimos en vivo-, tourbillones y, por supuesto, cronógrafos (por ejemplo esta preciosidad). En el pasado SIHH 2019 la manufactura lanzó una completa colección de relojes de piloto que, a mi entender, estaba perfectamente desarrollada por su coherencia y por su atractivo. Uno de los más destacados fue sin duda este IWC Pilot’s Watch Chronograph TOP GUN Edition “Mojave Desert”.

UNA CAJA ÚNICA

Gustará o no, pero el -tomemos aire de nuevo- IWC Pilot’s Watch Chronograph TOP GUN Edition “Mojave Desert” llama la atención desde que hace su aparición porque no es lo que te esperas de un cronógrafo ni de un reloj de piloto. Ni casi de un IWC. Pero el hecho es que funciona. La caja, de 44,5 mm de diámetro y 15,7 mm de altura, está hecha de cerámica. La cerámica color arena se inspira en el desierto de Mojave, donde se encuentra la China Lake Naval Air Weapons Station, la propiedad más extensa de la marina estadounidense. Este color, que es exactamente el mismo de los monos de aviación de los pilotos de la marina, es el resultado de una combinación de óxido de circonio y otros óxidos metálicos. A decir de la marca, no existe otro reloj en el mercado con esta cerámica.

Seguramente le hubiera venido mejor si los pulsadores hubieran sido también de cerámica porque contrastan demasiado, pero no es tampoco un detalle que me obligara a rechazar el reloj si me lo regalan. Por dentro de la caja hay otra de hierro dulce para proteger el movimiento de los campos magnéticos. Esto se solucionaría utilizando silicio u otros materiales antimagnéticos en el conjunto de volante y áncora, pero hay cierto placer en las cosas hechas a la antigua. A pesar de esa protección el reloj se siente muy ligero en la muñeca. Pero no débil o frágil: su presencia es muy sólida.

Las esfera mantiene los colores tierra incluso en las ventanas de fecha y día, por lo que el conjunto es muy armonioso y atractivo. No hay variación en la disposición de las subesferas ni en la forma de las manecillas, así como también se mantiene el gran triángulo -tradicional en los relojes de piloto- a las 12. Y, también como siempre, el tratamiento con Super-LumiNova es excelente. Pero sólo donde se ha aplicado, que es en los puntos estrictamente necesarios. La verdad es que sorprende que los numerales no sean luminiscentes también.

CALIBRE DE MANUFACTURA

IWC no tiene problemas en usar versiones del Valjoux 7750 -modificado en la casa- en sus cronógrafos para mantener los precios contenidos, pero en el caso del IWC Pilot’s Watch Chronograph TOP GUN Edition “Mojave Desert” ha optado por su calibre propio 69380. Un inciso: Mojave se pronuncia «mohavi», con una h como la del hawaiano aloha y una v sonora (no muda como en el español de España).

El movimiento late a 4 hercios y tiene una reserva de marcha de 46 horas. Está dotado de rueda de pilares y el rotor bidireccional. El cronógrafo mide 30 minutos (situado a las 12) y 12 horas (en la subesfera a las 9). A las seis en punto aparece el pequeño segundero.

La tapa roscada presenta en el centro la insignia de Top Gun, que es la escuela del ejército de aire norteamericano que forma a los mejores pilotos con las últimas tecnologías.

DISPONIBILIDAD Y PRECIO

El IWC Pilot’s Watch Chronograph TOP GUN Edition “Mojave Desert” ya está disponible en las boutiques de la marca y en sus distribuidores, pero no será fácil verlo porque es una edición limitada a 500 piezas. Tiene un precio de 10.100 euros y se entrega con una correa nato forrada de piel por dentro.

Por mucho que a primera vista pueda echar para atrás por esa combinación de colores, yo recomiendo ponérselo para darse cuenta de lo muy bien que queda. Más información en IWC.es.