El nuevo Moser Pioneer Centre Seconds Swiss Mad Red abunda en la idea de H. Moser & Cie. de ofrecer una alta relojería distinta. Los movimientos, los acabados y las complicaciones son clásicos, pero las esferas son bien distintas. Para empezar está el acabado fumé, tan propio de la marca y que se ha acabado por convertir en una elección estética cada vez más usada. No es que Moser la inventara, claro, porque ese tipo de esferas existe desde, como mínimo, los años 70, aunque se conocía desde mucho antes: las esferas se solían deteriorar y adquirir ese aspecto más claro en el centro y más oscuro en el borde. Pero sin duda ha sido Moser la que ha vuelto a traer estas esferas a la palestra.

Pero también está el gusto de Moser por quitar texto de la esfera. En primer lugar desapareció el Swiss Made como protesta por la poca exigencia de autenticidad en la industria relojera suiza. Y después llegó incluso a ofrecer esferas sin ni siquiera la marca. La verdad es que el resultado es espectacular, como se puede ver en estos Endeavour Dual Time Concept que vimos en vivo.

El Pioneer Centre Seconds es el modelo deportivo de la casa, ciertamente con un aspecto más potente y con detalles como el tratamiento con Super-LumiNova en manecillas y en los puntos sobre los índices. Aquí vimos en vivo el modelo inicial. El Moser Pioneer Centre Seconds Swiss Mad Red, como su nombre indica, es rojo, pero no es la primera vez que vemos esta llamativa esfera. El primer Swiss Mad Watch se presentó en enero de 2017 y tenía la caja hecha de queso suizo. Es el que aparece en la foto de aquí arriba, y hay más fotos en el reportaje en vivo. También vimos otra esfera roja en el aniversario de los Concept, aunque en este caso para mujer. Pero es desde luego el color menos usado (quitando una serie limitada en morado), y sin duda el más llamativo.

La sólida caja de acero de 42,8 mm y la altura de 10,6 mm transmite una sensación más deportiva que sus hermanos de la familia Endeavour. Si se observa los lados de la caja se ven cuatro zonas rebajadas y decoradas con estrías que se parecen un poco a las rejillas de entrada de aire de un automóvil, que subrayan el estilo aerodinámico y deportivo a la caja. La corona atornillada da fe de la resistencia al agua de la caja, de 120 m, y está grabada con una «M». Las superficies están bellamente terminadas con superficies pulidas y cepilladas.

De acuerdo con su naturaleza más deportiva, los marcadores de hora facetados son más grandes y gruesos que los que puede encontrar en un reloj Endeavour o Venturer, y cuentan con puntos luminiscentes. Otra signo distintivo de la casa que también aparece en este Moser Pioneer Centre Seconds Swiss Mad Red son las manecillas en forma de hoja, que son más anchas para acomodar una capa de Super-LumiNova, pero a la vez están esqueletizadas en la base permitiendo que la esfera roja brille.

El movimiento dentro de los Pioneer Centre Seconds es el HMC 200, un calibre automático diseñado, desarrollado y producido completamente en la casa. Incluso el órgano regulador está fabricado por la compañía hermana de Moser, Precision Engineering AG. Como señala Moser, el calibre HMC 200 es «100% suizo, 100% Moser». Gracias al sistema bidireccional de cuerda, el muelle real se tensa más rápidamente y mantiene la potencia durante un período mínimo de tres días (72 horas). Equipado con un volante Straumann original de cabezal plano, la gran masa oscilante está grabada con el logotipo de la compañía y los puentes están decorados con nervaduras Moser.

El Moser Pioneer Centre Seconds Swiss Mad Red tiene un precio de 12.300 euros y se puede comprar en la tienda online de la marca. Más información en Moser.es.