Jaeger-LeCoultre Geophysic Platino: fotos en vivo y precio
El Geophysic Platino es la versión más exclusiva del Geophysic 1958 de Jaeger-LeCoultre, y lo hemos fotografiado en vivo para poder apreciar su belleza
Cuando apareció el año pasado la reedición del Geophysic de Jaeger-LeCoultre ya dije que me parecía uno de los mejores relojes lanzados en 2014, en línea con la publicidad que lo acompañaba: «Te mereces un reloj de leyenda». Sus medidas de 38,5 mm de diámetro junto con sus toques deportivos le hacían el perfecto compañero del día a día. Ahora traemos el Geophysic Platino.
De hecho le dedicamos un vídeo que se puede ver pulsando aquí a las versiones entonces disponibles, las de oro rosa y acero que aparecen en la foto superior. Pero hemos podido ver la edición exclusiva de boutique del Geophysic platino, que tiene unas diferencias que merece la pena señalar.
Como se ve en el anuncio publicitario de arriba, la versión en platino es fiel reflejo de la versión original y respecto a las versiones de acero y oro pierde la cruz sobre la esfera y los numerales a las 3 y las 9 -sustituidos por un doble bastón-, además de ganar unos índices más largos. Además el nombre del reloj, Geophysic, pasa de las 6 a las 12, justo debajo del logotipo.
Son detalles que hacen del reloj una versión mucho más seria, más de vestir, y desde luego muy elegante. Quizá por eso sea esta versión la que aparece en la caja de platino, el absoluto tope de gama y en una edición limitada a 58 unidades: recordemos que 1958 es el año de aparición del reloj -cuyo verdadero nombre es, de hecho, Geophysic® 1958.
Por supuesto, y al igual que sus compañeros de colección, el reloj queda fantástico en la muñeca. Es una belleza incontestable. El cepillado de la carrura y el lateral de las asas contrastan con el pulido del bisel y el frontal de las asas, jugando con la luz para seducir irremediablemente a quien lo mira. El cristal levemente elevado apoya el look vintage del reloj pero sin perder la mesura arquitectónica.
Obviamente la exclusividad se paga: la versión en platino cuesta 27.300 €. Por ese precio se consigue una auténtica belleza hecha a imagen y semejanza del modelo original -incluida la caja de hierro dulce antimagnética- con una caja de tamaño perfecto y fabricada en uno de los más preciados y nobles metales y de la que sólo hay otras 57 unidades más en todo el mundo: difícil que alguna vez alguien lleve tu mismo reloj en una fiesta.
Tomada la decisión, sólo hay que acercarse a la boutique de Jaeger-LeCoultre en Madrid para hacerse con uno.