Maurice Lacroix Aikon Automatic y Aikon Chronograph
Los grandes éxitos de la casa, analizados a fondo
No cabe duda de que el gran éxito de Maurice Lacroix y el gran impulso que tiene la marca ahora mismo se debe al lanzamiento de los Aikon. Ya vimos en vídeo los Aikon Venturer, el modelo deportivo de la familia, pero quería dejar constancia tanto del Maurice Lacroix Aikon Automatic como de la versión crono, que fueron los que comenzaron la actual ruta de éxito de la casa.
El segmento de los relojes deportivos de lujo en acero es sin duda el que está más en boga, y lleva así ya unos años. Como ya sabemos el origen está en el Royal Oak de Audemars Piguet diseñado por Gerald Genta, que después se extendió con el Nautilus de Patek -también diseñado por Genta- con el que guarda un parecido notable. Como ahora mismo la política de las dos empresas es la escasez, se ha creado un deseo en el mercado de ese tipo de reloj, que muchas marcas se ha apresurado a llenar con una oferta que cada vez es más amplia.
Y ¿cómo podríamos definir ese tipo de reloj? Pues como un reloj elegante, refinado, delgado pero robusto, con un movimiento automático, una caja con formas definidas, con bisel elevado (generalmente con una forma diferente a la caja), una esfera simple de hora o fecha y hora, un dial texturizado, manecillas e índices luminosos y un brazalete de acero integrado. Y, normalmente, con precios elevados.
Desde su creación, Maurice Lacroix se centró en relojes de alta calidad percibida con precios razonables, principalmente en el rango de 1.200 a 5.000 euros. Cajas y esferas bien diseñadas, esferas complejas, piezas y módulos fabricados internamente… La colección Masterpiece, con relojes como el Moon Retrograde o el Double Retrograde resumían perfectamente esta filosofía, al menos en el segmento superior de la colección. Pero a la marca le faltaba algo fuerte, reconocible y deportivo en el otro lado de la gama, en el altamente competitivo segmento de los 1.000 a 2.500 euros.
Después de algunas investigaciones de mercado y conversaciones con clientes y minoristas, se llegó a la idea de crear un reloj deportivo de lujo con un precio asequible. Y también, buscando en archivos de la casa, se encontró la fuente ideal: el Calypso. Ciertamente este reloj de la década de 1990 necesitaba ser completamente rediseñado, pero algunos elementos eran aprovechables. Usando la apariencia deportiva y los 6 llamativos boceles del bisel, nació el Aikon. Lanzado por primera vez en 2017 en versiones de cuarzo, los modelos automáticos siguieron en 2018, con un fecha y hora y un cronógrafo.
Ambos modelos comparten el poderoso diseño de la colección, con sus modernas y atrevidas formas, empezando con el bisel redondo cepillado y adornado con seis salientes pulidos que remarcan la personalidad del reloj. La caja en sí, con su forma de barril, emana una sensación deportiva de lujo. Al igual que el bisel, la caja presenta varios acabados, cepillados en la mayoría de las superficies, con varios acentos pulidos en los lados, así como dos garras, que bajan por el brazalete o la correa. El gran diámetro se compensa con las asas integradas, lo que permite una sensación más compacta en la muñeca. Ambos relojes son resistentes al agua hasta 200 metros.
Tanto el Maurice Lacroix Aikon Automatic como el cronógrafo están disponibles con una pulsera de acero de cinco eslabones de nuevo diseño, así como con correas de cuero que combinan perfectamente con la caja. Ambos se entregan con un cierre desplegable. Una característica interesante, especialmente en este rango de precios, es el «EasyChange», un sistema de cambio rápido de pulsera o correa.
MAURICE LACROIX AIKON AUTOMATIC
El Maurice Lacroix Aikon Automatic es un reloj deportivo con fecha y hora. Esta versión está impulsada por el calibre ML115, un movimiento automático basado en una arquitectura ETA (o quizá Sellita). Visible a través del fondo de la caja, muestra una decoración agradable (aunque industrial) con Côtes de Genève y perlado. Este movimiento, que late a 4Hz y ofrece una reserva de marcha de 38 horas, es una opción sensata en comparación con el movimiento de manufactura que ofrece la marca, lo que permite mantener al Aikon Automatic en un rango de precios razonable.
El Aikon Automatic de tres manecillas es la más compacta de las dos versiones, con su diámetro de 42 mm y un grosor muy llevadero de 11 mm. Las dimensiones no son el único factor diferenciador, ya que la esfera presenta un motivo Clous de Paris que, junto con índices aplicados para las horas y una fecha con un marco metálico pulido, animan la esfera y transmiten mucha sensación de calidad. Aunque aquí sólo estamos viendo una esfera azul y otra negra, en realidad hay más versiones.
El precio del Maurice Lacroix Aikon Automatic es de 1.590 euros la versión con correa y de 1.690 euros la versión con brazalete. Son unos precios más que razonables para unos relojes cuya percepción de calidad es mucho mayor de lo que el precio podría sugerir.
MAURICE LACROIX AIKON AUTOMATIC CHRONOGRAPH
La segunda versión del Aikon Automatic es la más deportiva de las dos, no solo porque presenta un movimiento de cronógrafo, sino también por las diferencias en la caja y las esferas. En primer lugar, dentro de la caja hay un movimiento automático conocido y probado que la casa llama calibre ML112, basado en la arquitectura Valjoux 7750.
Este cronógrafo integrado y automático es una verdadera mula de carga, y es visible a través del fondo de la caja de zafiro. Está ligeramente decorado con Côtes de Genève. El movimiento funciona a 4Hz y cuenta con una reserva de marcha de 42 horas.
Cuando está equipado con este movimiento de cronógrafo, el Maurice Lacroix Aikon Automatic también se vuelve más audaz, con su diámetro de 44 mm y grandes pulsadores atornillados, que garantizan una resistencia al agua de 200 m, lo que no está nada mal para un cronógrafo (y de ahí que estén atornillados). La caja, debido al movimiento, es más gruesa, y sube a 15 mm. Como se ve tampoco es una locura.
El dial también es diferente, por supuesto, debido al diseño crono, pero también debido al patrón utilizado, decorado con cuadrados pequeños y regulares. Los índices aplicados y la ventana de fecha del día enmarcada, así como los contadores de cronógrafo -decorados con guilloché circular-, le dan un toque agradable y elegante al dial. Al igual que la versión de tres manecillas, hay numerosas versiones disponibles, ya sea con una correa de cuero o pulseras de acero de cinco eslabones.
En cuanto a los precios de estos Maurice Lacroix Aikon Automatic Chrongraph, están en línea con los de la competencia, pero dada la calidad del modelo, en realidad te estás llevando mucho más reloj. La versión de correa de cuero tiene un precio de 2.690 euros, mientras que si se elige el brazalete el precio sólo aumenta 100 euros hasta los 2.790 euros. En el momento de escribir este artículo hay en la web de la marca una oferta interesante: por 2.890 euros te llevas la versión de brazalete y la correa de cuero. No cabe duda de que, con esta política de calidad y precio, la joven manufactura va a llegar muy lejos. Más información en MauriceLacroix.es.