Los relojes de la Reina Isabel II
Un gusto realmente bueno
La muerte de la Reina Isabel II de Inglaterra, con el reinado más largo que ha tenido Gran Bretaña desde sus orígenes, supone el cierre definitivo del siglo XX. No recuerdo quién dijo algo como «todo alrededor cambiaba, pero ella permaneció igual». Es esa sensación de solidez, junto con su irredenta dedicación al servicio público (murió 48 horas después de estrechar la mano a la nueva primera ministra) y la dignidad con la que sobrellevó los distintos avatares de su familia (a veces confundida con frialdad) las que han hecho de ella una figura amada -o, como mínimo, respetada- en su país y en el resto del mundo.
Un detalle de Isabel II, que siempre fue coqueta, es que prácticamente siempre llevaba reloj, incluso cuando iba vestida de gala o, más aún, vestida de gala para un acto político o institucional, momentos en los que no es habitual ver relojes en la muñeca de las mujeres.
Vamos a ver algunos de los que han podido ser vistos en público, que demuestran su gusto por estas maravillas mecánicas.
JAEGER-LECOULTRE 101
En mi opinión, el reloj más importante de Isabel II, al menos desde el punto de vista técnico. Como ya conté, en 1929 Jaeger-LeCoultre lanzó el calibre mecánico más pequeño del mundo, compuesto por 78 piezas, pesaba aproximadamente 1 gramo y medía sólo 14 mm x 4,8 mm y tenía apenas 3,4 mm de altura. Eso de por sí le da un lugar de honor en la relojería, pero además lo consiguió entre la sociedad cuando, en 1953, Isabel II lo llevó durante su coronación.
El 101 es el que se ve en la primera foto del artículo, con las dos hileras de diamantes. Pero el reloj se vio a menudo en la muñeca de la Reina desde una década antes, pero sin los diamantes. Seguramente encargó uno simplemente de oro para el día a día. Es obvio que era un reloj muy querido por Isabel II.
Y eso que, para su boda el 20 de noviembre de 1947, la Consejo de la Federación Suiza le regaló un Vacheron Constantin 4481 que, con el tiempo, regalaría a Lady Di.
Para su jubileo de diamantes Jaeger-LeCoultre le hizo entrega de una espectacular nueva versión de 101, pero en esta ocasión se utilizó oro blanco en vez de amarillo. El reloj es aún más bonito así, en mi opinión.
OMEGA LADYMATIC
En 1992 la Casa Real publicó una imagen sorprendentemente cercana de Isabel II. Es esta:
En él se puede apreciar un Omega Ladymatic, más grande de lo que era habitual para una mujer, pero que luce muy bien en su muñeca. Está atada a ella gracias a un brazalete de oro construido en malla.
EL REINO DE PATEK
Isabel II parecía tener particular devoción por los Patek Philippe. Hemos visto numerosos retratos de ella llevando un modelo Ellipse:
Es un modelo que está adornado con un bisel de diamantes, que también sirven como índices horarios.
He visto otro retrato oficial en el que parece llevar un Ellipse gris, pero quizá es sólo por la luz o la edición de la foto:
Otro de los Patek más reconocidos de Isabel II es el 4975-1G, que se personalizó con un brazalete de perlas que siempre iba muy suelto (como casi siempre con sus relojes).
En los últimos tiempos Isabel II llevaba un Patek Philippe Calatrava Ladies de cuarzo de 20 mm de diámetro.
La peculiaridad del reloj son sus manecillas reviradas, algo que rara vez se ve.
SIN CLASIFICAR
También hay relojes de Isabel II que no se han conseguido identificar, o de los que sólo se intuye su procedencia.
Se dice que el que aparece en esta foto de 2015 es un Jules Audemars (de Audemars Piguet, claro), pero no he conseguido encontrar una prueba definitiva.
Hay otro reloj que sin duda se hizo a medida, y lo más seguro que por Patek Philippe. Pero no hay ninguna aclaración en ningún sitio.
Por último, Isabel II llevaba muy a menudo un reloj rectangular de oro, del que nada se sabe. Se dice que puede ser un Cartier, pero no es seguro.
Veremos a ver qué ocurre con estos relojes, y cuáles los que lleve Carlos III (además del Parmigiani Toric Chronograph que suele llevar), a quien Dios Guarde, como dice el himno de Gran Bretaña.