Se ve venir: Montblanc va a pegar otro pelotazo en el próximo SIHH de enero, igual que hizo en el anterior ( en enero de este año). Tiene una política muy clara: alta relojería a precios racionales, para lo que presenta sus modelos en acero y oro porque sabe que el aficionado medio no siempre tiene dinero para aventuras áureas.

Ahora nos trae nada menos que un reloj mundial (o si se prefiere un world timer, porque siempre parece que las cosas en inglés son más), con un esfera atractiva y un funcionamiento sencillo. Vamos a verlo más de cerca.

La esfera suena familiar, ¿verdad? Eso es por que recuerda al Patrimony Traditionnelle World Time que presentó Vacheron Constantin hace unos años pero que sigue igual de vigente. Ese modelo también tenía una visión del globo terráqueo desde el Polo Norte, pero con una esfera en mi opinión mucho más ajetreada que esta.

Está realizada en una esfera de zafiro en la que se va cincelando la forma de los continentes, rodeados por los océanos en un azul muy conseguido. Bajo esta primera esfera hay otro disco con la indicación de día y noche que gira con el mecanismo de las 24 horas y que va oscureciendo el mapa según corresponda, dando así una imagen visual de la rotación del globo y cómo de cerca o lejos estamos de la noche. Por último, en el borde de la esfera están los nombres de 24 ciudades que corresponden a los 24 husos horarios.

¿Cómo funciona?

De manera muy sencilla: para tener la hora en origen se coloca la ciudad correspondiente a las 6 horas, mediante el pulsador a las 8h. La hora en destino (donde estemos en ese momento) se ajusta con la corona. Según vamos viajando cambiamos esa hora, mientras que la de casa permanece siempre ajustada.

Esto se consigue mediante un calibre automático creado por Montblanc -es decir, Montblanc ha creado la complicación sobre un movimiento ya existente- y encapsulado en una caja de 41 mm de diámetro, un tamaño perfecto para enseñar la complicación manteniéndolo dentro de la categoría de «reloj de vestir», a lo que contribuyen las agujas facetadas y el bisel pulido.

Pero como decía lo mejor es que Montblanc lanza el reloj también con caja de acero, lo que permite dar un precio más que atractivo: 4.990 euros. El de oro rosa también está muy bien para lo que solemos ver: 13.900.

Sólo queda que la marca esta vez haga acopio de unidades suficientes y se pueda ver el modelo con normalidad en las tiendas, porque por ejemplo la colección del año pasado aún no está en España, o no de manera consistente.

Toca esperar un mes para ver el modelo en vivo; mientras tanto, siempre está la Ficha Técnica.