TAG sigue su camino de éxito en el mundo de los relojes conectados y ahora lanza el modelo seguramente más demandado: el TAG Heuer Connected Modular 41, que le va a dar acceso a muchos más clientes. Particularmente las mujeres.

Ya nadie pone en duda que el movimiento de TAG Heuer hacia el sector del smartwatch fue estratégicamente impecable. El Connected Modular 45 (que vimos con fotos y vídeos en vivo en este artículo) es todo un éxito que ofrece un reloj conectado a los seguidores de la marca sin que sientan que están traicionando sus principios, y además les da la posibilidad de intercambiarlos por un Carrera Calibre 16 o un Calibre 5. Así se puede hacer una jornada laboral conectada y una vida personal mecánica sin salirse de la marca. No hay mejor manera de fidelizar a un cliente.

TAG Heuer Connected Modular 45

Pero el reloj tiene una pega: su tamaño. Cuarenta y cinco mm de diámetro es una medida comprometedora para la mayor parte de las muñecas e imposible para las mujeres. Y ese problema es el que viene a solventar el TAG Heuer Connected Modular 41. El diámetro se ha reducido notablemente así como la altura, que pasa a 13,2 mm. Sigue sin ser pequeño, pero es desde luego mucho más manejable. Además hay que recordar que la caja está bien equilibrada, por lo que los conectados de TAG se llevan muy bien. Y el material utilizado es titanio, lo que los hace muy ligeros.

Desarrollado en colaboración con Intel y Google, el TAG Heuer Connected Modular 41 ofrece una pantalla AMOLED de 390 x 390 con una resolución de 326 ppi y un brillo mejorado: 350 nits máximo. Su capacidad de almacenamiento también ha mejorado hasta los 8 GB y su memoria RAM hasta 1 GB, lo que permite un uso muy fluido.

Por supuesto el TAG Heuer Connected Modular 41 también disfruta del concepto modular, que es lo que hace tan atractivos a los smart watches de TAG. En las boutiques y online existen 7 modelos estándar cuyas correas y asas pueden personalizarse. Se han añadido nuevos colores para la correa a la colección: piel rosa, azul o blanca, hasta un total de 9 correas distintas. El módulo conectado puede sustituirse por un módulo mecánico de tres agujas Calibre 5. Bastan unos clics para que el reloj conectado se convierta en un atractivo reloj mecánico.

Es hermético hasta 50 metros y cuenta con GPS, un sensor NFC que permite realizar pagos contactless con Android Pay, una pantalla AMOLED de alta definición y una gran selección de esferas TAG Heuer. Con el sistema operativo Android Wear los TAG Heuer Connected 45 y 41 son compatibles con los smartphones Android 4.4 e iOS 9 y sus versiones posteriores.

Por supuesto la alta capacidad de personalización hace que los precios varíen casi tanto como los modelos resultantes. Pero sí podemos decir que el modelo básico (con correa de caucho) tiene un precio de 1.100 euros. Si decidimos ponerle un brazalete -también de titanio- el precio sube hasta los 1.900 euros. Pero como digo, el precio varía según nuestra personalización. Este mes comienzan a llegar las primeras unidades, que volarán como una pluma en el viento. Hay más información en TAGHeuer.es.