Jaeger-LeCoultre expande su colección de relojes deportivos, los Polaris. Mejoran sustancialmente sus prestaciones, por lo que la casa ha añadido un nuevo apellido; ahora se llaman Jaeger-LeCoultre Polaris Mariner, una indicación de cuál es uno de los límites que ahora rebasa la colección: el de la inmersión.

Por hacer un poco de cronología, recordemos que los nuevos Polaris se lanzaron en el SIHH de 2018. Es la gama deportiva -o más informal, si se quiere- que empieza en un reloj de tres agujas y va complicando sus motores. La versión Date se puede ver aquí con fotos en vivo, y en el artículo hay enlaces a las demás versiones -también en vivo-.

A primeros de este año apareció la Polaris Date Limited Edition que vimos en vivo aquí. El reloj fue un exitazo simplemente por la esfera, que pasaba de ser monocromática a tener un degradado que embellecía sobremanera a la pieza. En ese momento dije que es una pena que JLC no mantuviera la esfera y que además introdujera otros colores, también en degradado. Esto no ha ocurrido (aún), pero lo que sí han hecho es mantener el degradado en azul en estos nuevos Jaeger-LeCoultre Polaris Mariner.

¿QUÉ HAY DE NUEVO?

El Polaris Date de 2018 fueron los modelos con las vibraciones vintage más fuertes, el carácter más cercano a su antepasado de 1968 que es en quien se ha basado el actual. Entonces, ¿qué ha cambiado sobre la versión de hace dos años? Comencemos con las características externas del reloj. El Jaeger-LeCoultre Polaris Mariner Date conserva el diámetro de la caja de acero inoxidable de 42 mm (con una altura de 13,92 mm), la combinación de superficies cepilladas y pulidas y las dos coronas. En este caso sólo se ofrece -al menos por ahora- con un brazalete deportivo de acero integrados que están terminados con las mismas superficies cepilladas y pulidas que la caja, y que ya conocíamos de la anterior colección de Polaris.

Otra novedad es el fondo de la caja de cristal de zafiro, a pesar de que la resistencia al agua ha pasado de 200 a 300 metros. De hecho el reloj cumple la norma ISO 6425 -cuyos requerimientos expliqué en este artículo-, por lo que la corona utilizada para colocar el bisel interior está atornillada y tiene una banda de seguridad naranja para advertir a los buceadores cuando no está completamente atornillada. Otra característica que distingue al Jaeger-LeCoultre Polaris Mariner Date es la forma en que la sección de tiempo de inmersión de 15 minutos se ha acentuado con una línea blanca gruesa, que va desde el triángulo a las 12 a las 3 en punto, y los marcadores de color naranja brillante a los 5, 10 y 15 minutos.

La esfera azul vibrante y los toques de naranja contribuyen en gran medida a refrescar la colección para darle un aire más contemporáneo. Como reloj de buceo profesional, la legibilidad en condiciones de poca luz es fundamental, y las manecillas, los marcadores de hora y los números se tratan con Super-LumiNova. Con dos colores, además. Para maximizar la legibilidad, la manecilla de los minutos -tan importante- tiene una luz naranja en la punta, mientras que la manecilla de los segundos central, los índices, los números y la manecilla de las horas brillan en azul en la oscuridad.

Cuando miras de cerca la esfera se aprecian las diferentes texturas, que agregan contraste, interés y profundidad. La esfera en azul degradado, que va desde un color azul más claro en el centro hasta una intensidad de azul más saturado en el perímetro, presenta tres acabados diferentes: el centro está decorado con un elegante acabado cepillado con rayos de sol; el disco de horas y minutos está graneado, y el bisel interior giratorio muestra un acabado opalino brillante.

La corona superior opera el bisel interior y la corona inferior se usa para configurar la hora y la fecha. El Jaeger-LeCoultre Polaris Mariner Date utiliza el nuevo calibre automático interno 899 AB, que aumenta la reserva de marcha de 38 a 70 horas y utiliza un rotor de tungsteno para favorecer una carga mucho más rápida.

La única pega del Jaeger-LeCoultre Polaris Mariner Date, y no es un problema menor, es el precio: cuesta 11.000 euros. Jaeger, afortunadamente, mantiene la anterior versión, que sólo cuesta 8.350 euros (de por sí un precio alto). Pero no es menos cierto que, puestas las dos versiones una al lado de la otra, la «normal» no tiene más argumento que el precio. Jaeger-LeCoultre.es.