Probablemente estos Breguet Type XXI 3815 Titanio no son precisamente lo que le vendría a la cabeza a alguien a quien se le preguntara por modelos de Breguet. Sin embargo, tienen una conexión directa con la esencia de la marca, además de un porte muy personal.

UN POCO DE HISTORIA

Louis Charles Breguet (tataranieto de Abraham-Louis Breguet, el fundador de la casa relojera) fue uno de los pioneros de la aviación. En 1916 creó el avión Breguet XIV, que fue uno de sus aviones más apreciados y usados. Era un bombardero y avión de reconocimiento en cuya construcción, por primera vez, se usó más metal que madera. Además la ametralladora estaba sincronizada con la hélice para poder disparar sin sustos (para el piloto, no para los enemigos). Fue tal su éxito que, entre 1917 y 1926, casi 8.000 ejemplares de este mítico aparato equiparon a una quincena de países. 

Al Breguet XIV le siguieron otros modelos, como el Breguet 19 o, más tarde, el Breguet Deux-Ponts. Simultáneamente a estas actividades de Louis Charles Breguet y su firma aeronáutica, la casa relojera Breguet diseñó mecanismos de cronógrafos para los cuadros de instrumentos de las cabinas y comenzó a fabricar relojes para los aviadores. Así fue como en 1935 desarrolló sus primeros cronógrafos de muñeca. Unos veinte años más tarde, Breguet lanzó la producción del Type XX por encargo de las fuerzas armadas francesas; el célebre cronógrafo equiparía a las fuerzas aéreas y aeronáuticas francesas hasta principios de los 80. Este de aquí abajo es un Breguet Type XX nº 4100 de primera generación, que formaba parte de una serie de 500 relojes encargados especialmente para los pilotos del Ejército del Aire francés en 1958 y entregados en enero de 1960.

El Type XX se volvió a incorporar a filas en 1994, al que sucedieron los más complejos Type XXI y Type XXII. Y ahora llegan estos Breguet Type XXI 3815 Titanio, que difícilmente van a pasar desapercibidos, merecidamente.

LIGERO, PERO CONTUNDENTE

La caja tiene un diámetro de 42 mm, pero los grandes numerales y los colores utilizados dan una impresión de más tamaño. Sin embargo el uso del titanio hace que el reloj sea una pluma en la muñeca, de manera que logra combinar una presencia notoria con una comodidad de uso excelente. La corona -grande, acanalada y con la inicial de la casa grabada- está roscada, una buena idea porque el reloj es hermético hasta los 100 metros, así que el roscado nos evita sustos en la piscina. Pero hay que tener precaución con los pulsadores, que son los clásicos de pistón y por tanto no están protegidos. El fino acanalado de la carrura de todos los Breguet también está presente en estos Breguet Type XXI 3815 Titanio, reforzando así los rasgos familiares del reloj.

Como Breguet no se conforma con hacer las cosas como las hace todo el mundo, el bisel bidireccional no es un simple anillo de aluminio anodizado o de cerámica, sino que también está hecho en titanio, pero rebajado para que los numerales e índices queden en relieve. Y después se ha lacado en negro para que resalte bien la información.

Pero la principal actualización de estos nuevos Breguet Type XXI 3815 Titanio es la esfera, que ha sido totalmente remodelada para la ocasión. En primer lugar, se ha simplificado y actualizado toda la disposción de los elementos. En segundo lugar, y lo más importante, ahora incorpora toques de color en las agujas y los números, algo bastante inesperado para Breguet. Sin embargo, el resultado es convincente y combina bien con el atuendo informal de estas nuevas ediciones.

La base de la esfera está lacada en negro intenso. Además, el reloj cuenta con una pista de minutos/segundos de nuevo diseño en la periferia, y los índices aplicados se han sustituido por numerales arábigos que de hecho son más de la época de los primeros aeroplanos Breguet que de la época en la que apareció el Type XX original. Estos están rellenos de material luminiscente de color naranja o verde brillante, que también se encuentra en las agujas de las horas y los minutos.

Otra de las actualizaciones la encontramos en los elementos que se han incorporado a la esfera. Anteriormente los Type XXI y XXII eran cronógrafos tricompax, En estos Breguet Type XXI 3815 Titanio, sin embargo, sólo aparecen dos registros. Y además no corresponden a la función de cronógrafo. A las 9 horas aparece el pequeño segundero, y a las 3, adoptando el tamaño «Big Eye», lo que nos encontramos es un contador de 24 horas. No muy útil para un piloto, la verdad; pero, asumiendo que quienes lo van a usar tampoco lo son, tener una complicación más siempre es de agradecer.

Entonces, ¿cómo se miden los tiempos cortos? Pues con las manecillas centrales. Porque hay dos. La superior cuenta los segundos transcurridos y, en cuanto se pone en marca el contador, aparece la segunda manecilla, que se encarga de medir los minutos. Están acabadas en diferente textura (pulido y arenado, respectivamente) y la de minutos acabada en una punta de flecha calada y con la misma forma de los triángulos a las 3 y las 9. Sencillo y efectivo.

Además el contrapeso de las dos manecillas es distinto para mantener la diferencia entre ambas, y ambos con el mismo calado para aunar la estética y para dejar ver más esfera y no recargarla más (porque ciertamente está muy llena).

CALIBRE EXCELENTE

Bajo el cristal de zafiro posterior de los Breguet Type XXI 3815 Titanio se encuentra el conocido calibre 584Q/A con su característica complicación «retour en vol» o flyback. El flyback permite que el cronógrafo se detenga y se ponga a cero con una sola pulsación del pulsador situado a las 4 horas, permitiendo así cronometrajes consecutivos.

Este movimiento automático, basado en una arquitectura Lemania, incorpora las últimas tecnologías implementadas por Breguet, como el escape y la espiral de silicio. Es un cronógrafo accionado por levas, que funciona a una frecuencia de 4Hz y almacena 48 horas de reserva de marcha.

La decoración no es tan profusa como en otros relojes más clásicos de la casa, porque tampoco es el caso en un reloj como éste. Pero es intachable, con puentes bien acabados y un rotor específico para esta edición de titanio, fabricado en oro con un motivo guilloché grabado a mano. Uno de los orgullos de Breguet, como ya expliqué en el reportaje sobre mi visita a la manufactura.

DISPONIBILIDAD Y PRECIO

Cuando pensamos en Breguet pensamos, lógicamente, en alta relojería, algo que siempre se refleja en el precio. Estos Breguet Type XXI 3815 Titanio tienen un precio nada disparatado si estamos hablando de una marca como esta: 14.600 euros, que compite muy bien con muchas marcas porque te da un cronógrafo flyback con una mecánica de última generación y acabados artesanales, además de una presencia inconfundible. Los relojes ya están disponibles en las boutiques de la marca y en los distribuidores autorizados. Sólo queda elegir cuál de ellos. Para mí el naranja. ¿Y para ti?.

Más información en Breguet.es.