He dicho a menudo que, para mí, A. Lange & Söhne es, ahora mismo y desde hace ya tiempo, la número uno del mercado, seguida de Vacheron Constantin y Patek Philippe, aunque PP está despertando de su sopor de años y está haciendo cosas realmente novedosas y excitantes, mientras que VC parece estar quedándose atrás (sobre todo en marketing, tan importante hoy en día). Todo es, por supuesto, una apreciación personal, y como tal está sujeta a tantas discusiones como individuos hay. Y lo mismo pasa con mi siguiente aseveración: El Lange 1 es el reloj perfecto. Y, por extensión, su hermano mayor, el Grand Lange 1, también lo es. Sólo les diferencia el tamaño.

Sin duda ayuda el que el diseño de la esfera esté basado en la espiral áurea, lo que inmediatamente sintoniza con nuestro sentido de la belleza.

Y eso que, si te describieran el producto sin conocerlo, mentalmente dirías que eso no iba a funcionar: una subesfera principal descentrada, el pequeño segundero a las 5 horas y en intersección con la esfera principal, una ventana de fecha doble y desplazada hasta la una, y encima remarcada por un perfil…

Pero cuando ves el producto terminado, te quedas (o yo me quedo) con la boca abierta. Es como escuchar el Adagio de la Sonata en Fa Mayor Köchel 332: todo es armonía y perfección.

Quiere decirse que este Grand Lange 1 me tiene enamorado. Y no sabría -si pudiera permitírmelo- si tener este tamaño o el del Lange 1 normal.

Al oír Grand Lange 1 se podría pensar que estamos hablando de un reloj grande, pero en absoluto. En efecto tienen un diámetro de 41 mm, pero la altura es de solo 8,2 mm que, si tenemos en cuenta los mecanismos que tiene y, sobre todo, la reserva de marcha de 72 horas, es francamente sobresaliente.

El diseño de la caja, disponible en oro blanco o rosa de 18 quilates, es fiel al original, con elegantes asas cónicas, un delgado bisel abombado y un elegante pulsador rectangular a las 10 horas para avanzar la fecha.

La gran novedad del Grand Lange 1 es la nueva textura granulada que presenta la esfera de plata maciza. Merece la pena comparar el efecto que produce esta esfera con la del Grand Lange 1 edición «25 Aniversario» de 2019. Es casi como ver dos relojes diferentes. Las esferas granuladas/arenadas/texturizadas son una tendencia de moda estos días y han sido adoptadas incluso por pesos pesados como Patek Philippe en su calendario anual Travel Time, que vimos en vivo.

No sólo revitalizan la esfera con un toque más contemporáneo, sino que su superficie mate absorbe la luz y resalta los demás elementos de la esfera. En los dos nuevos modelos Grand Lange 1, la textura arenosa de la esfera es de color gris. Aunque no lo parezca, ambas ediciones tienen exactamente el mismo color de esfera, pero la forma en que los elementos de oro blanco o rosa se reflejan en la superficie gris da como resultado dos tonos bastante diferentes, fríos o cálidos.

Todos los elementos de oro blanco o rosa de la esfera – manecillas, marco de la ventana de la fecha, números aplicados y marcadores romboidales- destacan con más brío aún sobre el apagado fondo arenoso. Los contadores ligeramente empotrados para las horas y los minutos y el pequeño segundero están decorados en círculos que juegan suavemente con la luz, creando ilusiones ópticas onduladas.

Si se observa con atención, se pueden apreciar los chaflanes suavemente biselados de las indicaciones horarias descentradas, así como la leve invasión del contador del pequeño segundero en la vía de los minutos entre las 4 y las 5 horas.

Al igual que las marcas horarias, las inscripciones de la periferia de la esfera del Grand Lange 1 son blancas, excepto por la presencia de dos pequeños triángulos rojos en el indicador de reserva de marcha para indicar la energía decreciente del movimiento.

CALIBRE L095.1

El calibre L095.1 es el mismo movimiento delgado de cuerda manual que impulsa el Grand Lange 1 desde 2012. Equipado con un solo barrilete, el mayor diámetro del movimiento (34,1 mm x 4,7 mm) llena perfectamente el fondo de la caja. Las proporciones ampliadas también significan que los ejes de las agujas se desplazan hacia fuera, liberando espacio en la esfera y respetando la disposición descentrada original de las funciones en la esfera.

Aunque la característica platina de tres cuartos de plata alemana no tratada (lo que nosotros llamamos alpaca) oculta la mayor parte del movimiento de 397 piezas, los adornos son superlativos. El acanalado de Glashütte en las platinas, las joyas con rodamiento de color rojo rubí en chatones de oro pulidos a espejo y asegurados con tornillos azulados y el volante grabado a mano son sólo algunos de los refinados acabados a mano que lo identifican como un movimiento Lange.

PRECIO Y DISPONIBILIDAD

El Grand Lange 1 tiene un precio de 45.900 euros, cualquiera que sea el oro elegido, y se puede encargar en las boutiques de la marca o en sus distribuidores autorizados.

Por supuesto el precio es discutible según las preferencias de cada uno. Para mí, por su diseño, por su ejecución en la esfera y en el calibre y por cómo queda en la muñeca, no me plantea ninguna duda a la hora de comprarlo. Siempre que consiguiera salir de la tiesura que me es propia, claro. Más información en Lange.com.