Los relojes de buceo de Certina están entre sus modelos más celebrados y buscados, si no los que más. Todos los aficionados a la relojería saben que, si quieren un diver certificado suizo que no se dispare de precio, los de Certina son una apuesta segura. Desde luego los de estilo vintage, como el PH200M que vimos en vídeo. Pero es que sus relojes modernos son igualmente deseables porque tienen un estilo sobrio, estilizado y muy legibles, lo que les permite ser usados como como reloj de diario. Este Sea Turtle Conservancy que vimos en vivo es el hermano del Certina DS Action Diver Titanio que presentamos ahora.

El Certina DS Action Diver Titanio tiene las mismas medidas que sus compañeros de colección: 43 mm de diámetro no lo clasifica como pequeño, pero la impresión que da es de ser de menor tamaño. Y como la altura es contenida, el reloj va a ser tan ponible como Certina nos tiene acostumbrados. Por supuesto a este nivel de precios no podemos pedir un bisel cerámico, pero el de aluminio que lleva está muy bien hecho, con un tono que mezcla muy bien con el de la esfera. A las 12 horas tiene un inserto con Super-LumiNova, como es normativo en un reloj con la certificación ISO 6425.

Y, hablando de esa certificación, hay que recordar que es enormemente exigente. Estos son los criterios que debe cumplir un reloj de buceo certificado:

– PRUEBA DE MAGNETISMO:
3 exposiciones a un campo magnético de 4.800 A/m. El reloj debe mantenerse en +-30 seg/día sobre la precisión inicial. 

– PRUEBA DE GOLPES:
Dos golpes con un martillo de plástico duro  de 3 kg montado en un péndulo con una velocidad de impacto de 4,43 m/seg (equivale a una caída de 1 m — mgh=mv2/2). La primera de canto a las 9, y la segunda plano sobre el cristal. El reloj debe mantenerse en +-60 seg/día sobre la precisión inicial. 

– PRUEBA QUÍMICA 1:
El reloj se sumerge en una solución de cloruro sódico (agua salada) de 30 gr/l durante 24 horas. El reloj debe mantener sus cualidades de resistencia a la corrosión.

– PRUEBA QUÍMICA 2:
El reloj se sumerge en agua a 30 cm de profundidad (0,3 bares) entre 18 – 25º C durante 50 horas. El reloj debe mantener su mecanismo en correcto funcionamiento.

– PRUEBA DE GOLPE TÉRMICO:
El reloj se sumerge en agua a 30 cm de profundidad (0,3 bares) a 40ºC durante 10 minutos. A continuación pasa a agua a 5º C durante 10 minutos, y de nuevo a 40º C otros 10 minutos. (Las transiciones serán menores de 1 minuto). El reloj no debe tener filtraciones de agua.

– PRUEBA DE LA CORONA:
El reloj es sometido a una presión un 25% mayor que la máxima indicada (nominal). Se aplica sobre la corona una fuerza de 5 Newton en sentido perpendicular al giro. (Se entiende aplicado a todas las coronas y pulsadores). El reloj no debe tener filtraciones de agua.

– PRUEBA DE PRESIÓN:
El reloj se somete a una presión de P=(L+1/4L)/10 bares, siendo L la máxima indicada (nominal) (es decir, un 25% superior pero en agua estática). Dicha presión se consigue en menos de 1 minuto y se mantiene durante 2 horas. Luego se reduce a 0,3 bares en menos de 1 minuto y se mantiene durante 1 hora más. El reloj no debe tener filtraciones de agua.

– PRUEBA DE FILTRACIONES:
Se realiza antes y después de cada prueba de filtración. El reloj se calienta sobre una placa metálica a 40-45º C durante 10 minutos y se coloca una gota de agua entre 18-25º C durante 1 minuto sobre el cristal. El reloj no debe mostrar trazas de condensación.

– PRUEBA DE PRECISIÓN:
Después de las pruebas anteriores, el reloj debe de mantenerse en +-30 seg/día sobre la precisión inicial. 

– PRUEBA DE LA CORREA:
El reloj se somete a una fuerza aplicada en direcciones opuestas sobre los pasadores de la correa de 200 Newton. (Unos 20 Kg)
El reloj no debe sufrir ningún daño aparente en los puntos de fijación.

– PRESELECCIÓN DE TIEMPO:
Presencia de dispositivo de preselección de tiempo protegido contra la manipulación accidental o incorrecta. En caso de ser un bisel giratorio debe tener una escala ascendente  de 60 minutos alineada con las marcas del dial y los índices de 5 minutos deben estar claramente destacados.

– VISIBILIDAD:
A una distancia de 25 cm en la oscuridad, deben de ser plenamente apreciables:
– Las agujas de horas y minutos claramente diferenciadas.
– El tiempo transcurrido del dispositivo de preselección.
– Indicador de funcionamiento (normalmente el segundero).

– MARCAS:
Deben de distinguirse de los relojes que no han pasado las pruebas, teniendo marcadas las palabras DIVER´S WATCH L M, o DIVER´S L M, siendo L la profundidad máxima garantizada por el fabricante. La marca puede estar en la esfera, parte trasera, o en cualquier otra parte visible.

Como se puede ver es un conjunto de pruebas extenso y exhaustivo, lo que hace que en el caso de un reloj como este Certina DS Action Diver Titanio sea algo aún más plausible, en tanto en cuanto es un reloj que apunta al segmento bajo y, sin embargo, ofrece toda la garantía de relojes de más precio.

La esfera sigue siendo igual de atractiva, con un fondo de rayos de sol que oscila entre el gris y el marrón, según incida la luz. Y los índices y manecillas están perfectamente tratados con Super-LumiNova.

Por dentro del Certina DS Action Diver Titanio, nuevamente, se mueve el calibre Powermatic 80, lo que es toda una garantía de fiabilidad y longevidad. Por último, el brazalete, que obviamente también es de titanio, se complementa con un extensor de microajuste para adaptarse a los diámetros de la muñeca en los descensos y ascensos marinos. Si es que alguna vez se usa de verdad como diver.

El precio, siendo un reloj de titanio, es mayor que sus hermanos de acero, pero aún así es muy competitivo, habida cuenta que el titanio aumenta mucho el precio a cambio de su comodidad de uso y mayor elegancia: 990 euros es un muy buen precio para este todoterreno, que ya está disponible en las tiendas. Más información en Certina.es.